Changes

Capitulo 13: Revelaciones

Alec abrió los ojos en el mismo momento en que su mano estaba rozando la espada, pero no tocándola. El silencio reinaba a su alrededor, cosa rara en una audiencia.

—Menos mal que he llegado a tiempo.

El chico giro su cara y vio a Sophie y un hombre elegantemente vestido a su lado. Rosemary miro hacia la misma dirección para encontrarse con la amigable cara de su amigo Adrien mientras la cazadora de sombras iba en dirección a Alec y apartaba la espada de su lado.

—Creí que no llegaría a tiempo —Comento la chica mirando a un sorprendido Alec el cual miraba a toda la audiencia paralizada—vuestro amigo el brujo los ha paralizado.

—Te vas a meter en problemas por nuestra culpa.

—Nada que no se solucione con un par de mimos y un poco de persuasión, lo que ha hecho Gideon ha estado fuera de lugar y pido disculpas en su nombre, solo puedo decir que es extremadamente sobreprotector en cualquier asunto que tenga que ver conmigo.

—Un rasgo típico de los Lightwood—Rio Rosemary mientras se acercaba a su amigo y le agradecía con la mirada el haber intervenido—¿Has leído la carta?

—Si y estoy de acuerdo con mi yo del futuro, no podéis invocar a un vigilante porque si, es un riesgo muy grande para todas las almas que ya han cruzado y tu como bruja espirita que eres deberías de haber respetado esa norma, no está impuesta por gusto.

—No culpes a Rose, la culpa fue mía, yo la obligue...en cierta forma.

—Eso ha sonado muy mal Alec—Rose se llevó una mano a la frente ante el comentario de su amigo. —Ha sonado fatal.

—¿Es que te ofreció sexo a cambio de invocar un guardián?, No se cómo este el tema del libertinaje en la época de la que venís.

—¡¡Noooooo!! —Gritaron ambos a la vez ante la afirmación del brujo y ante la atenta mirada de Sophie, al cual se puso roja ante el desvergonzado comentario para luego mirar de nuevo a Alec y Rosemary.

—¿Cómo que de la época de dónde venís? —Pregunto la cazadora ante e comentario que había hecho Adrien —¿De qué diablos está hablando el brujo?

Viendo que no podrían mantener por más tiempo la fachada y que la magia de Adrien se estaba desvaneciendo y todos a su alrededor recuperaban poco a poco la movilidad no vieron otra salida que la huida.

—¿Confías en nosotros Sophie? —Pregunto Alec tendiendo la mano a su antepasada. Esta lo miro y empujada por el obvio carácter de líder que Alec desprendía tomo su mano mientras Adrien abría un portal para salir de la sala. —Gracias—Sonrió el chico.

—Solo espero no tener que matarte.

—Seguro que no.

Gritos de asombro llenaron la sala en el momento en que la parálisis paso. Gideon miraba hacia la espada que estaba en el suelo y luego hacia el vórtice donde estaba su novia y los dos jóvenes que estaban retenidos en orden de la clave, en compañía de lo que parecía un brujo.

—¡¡¡Sophie!! —Grito Gideon con la angustia que rápidamente paso a ser ira hacia Alec y los demás—¡¡dejadla libre!!

—¡¡ Volveré pronto Gideon, confía en mi!!

Acto seguido entraron en el portal y desaparecieron ante la atenta mirada de todos los presentes.

Pero ni mucho menos se pensaban quedar con los brazos cruzados viendo como su prometida se había convertido en una fugitiva.