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El sargento se percato que la joven de tés morena estaba muy nerviosa, no estaba seguro si fue correcto decirle lo del tutor, había muchos rumores de que ellos eran personas muy crueles, y estrictos con sus "tutoreados" sin embargo, pensaba que era mejor no haberle dicho a la joven.

Pasaron alrededor de dos horas cuando por fin llegaron al lugar donde había dos aviones.

-Señorita Sarabi, hemos llegado a donde están los aviones, aquí también conocera a la persona que también ira en representación a su distrito

-Entiendo...¿Ya llegó la otra persona?

-Me parece que si... permítame abrirle la puerta...

-No se preocupe... yo puedo...- La joven intentó abrir la puerta, sin embargo no estaba segura de cómo hacerlo, así que el sargento tomó eso a su favor y abrió rápido la puerta ofreciéndole una mano para bajar

Al momento de bajar se dio cuenta que 3 personas estaban viéndola directamente, imaginó que el otro joven de tés morena era el participante que seria su quipo para el evento, sin embargo solo uno podía vivir... o era lo que ella en su momento escucho.

Atrás del joven (que a primera vista parecía muy amable), había una mujer de mayor edad, cabello blanco y traje de telas costosas. También parecía muy amable por lo que imaginó que por ser mujer podría ser su tutora... o era lo que esperaba.

Sarabi empezó a acercarse con el sargento, se dio cuenta que el hombre que estaba solo la miraba con mirada fuerte

"por favor, se más amable de lo que pareces"

-Buenos días, soy Sarabi Ela, mucho gusto- Sarabi intentó verse tranquila pero se veía muy nerviosa, cosa que hizo que la mujer se ablandara un poco

-Buenas días, soy la vice presidenta de la organización de salud, dime Mariana- la mujer tomó la mano de la joven- cualquier cosa que necesites estoy a tus ordenes

"Ella podría ser mi tutora, lo sabia"

Esto hizo que Sarabi se sintiera más cómoda

-Yo soy Moroni- El joven que estaba a un lado de Mariana se acercó - Demos nuestro mejor esfuerzo

Sarabi asintió con una sonrisa en su rostro pensó "si... ya estoy aquí, por lo menos debo de estar al tanto de todo"

Todos, incluyendo al sargento giraron a ver al hombre que al igual que Mariana, tenía cabello muy claro y ojos verdes, su carácter parecía ser fuerte y frío, Sarabi se sintió intimidada con su sola presencia.

-Soy Maciel, tu tutor...-Cuando escucho esas palabras Sarabi sentía que todo el mundo se le cargaba en los hombros- Estaré a cargo de tí, así que espero que no causes problemas

-si señor... no se preocupe haré lo que usted me diga

Maciel parecía que le agradaban esas palabras

-Entiendes rápido, muy bien, nos retiraremos de una vez, nunca me ah gustado llegar tarde

Maciel subió las escaleras de la avioneta, Sarabi no sabía como despedirse.

-Mucho gusto- Inclinó la cabeza- con permiso

Sarabi empezó a subir rápido las escaleras de la avioneta, al entrar se dio cuenta de lo lujoso y dorado que era el interior, Maciel estaba sentado cerca de la ventanilla y frente a él había un asiento vacío. Le hizo un gesto con la cabeza indicando que se acercara, cosa que Sarabi hizo inmediatamente

-Siéntate- El hombre se dio cuenta que la joven realmente haría exactamente lo que le dijera.

-Párate- La joven se levantó

-Siéntate- La joven se volvió a sentar, esto molestó a Maciel- ¿Por qué carajos haces exactamente lo que te digo?

-Causar problemas es lo último que quiero, usted es mi tutor y el sargento me dijo que debía obedecerlo.

-Es cierto... soy tu tutor y si quieres salir con vida de ese lugar deberás hacerme caso ¿entiendes?

-Si señor- Sarabi asintió inmediatamente

-Me agrada que tengas esa mentalidad, presentante, dime tu nombre...- Maciel se inclinó hacía Sarabi -¿Qué te gusta hacer?¿que haces en tu tiempo libre?¿Tienes novio/pareja?

-Soy Sarabi Ela- Sarabi se inclinó mas en el asiento, tener cerca la limpia y perfecta cara de Maciel la ponía nerviosa- ...en mi tiempo libre me gusta leer los libros de mi hermanastra, no tengo pareja porque mi madrastra dice que mi única obligación es hacer los quehaceres de la casa

-Tu obligación es ir a la escuela, me parece que ya terminaste los estudios básicos

-Si señor, los terminé, pensé que si terminaba siendo la mejor de la generación mi madrastra me permitiría terminar con mis estudios avanzados... no fui la primera pero si obtuve el promedio necesario para conseguir una beca de manutención y académica, sin embargo mi madrastra pensó que al dedicarle más tiempo a la escuela que a la casa bajaría mí rendimiento en los quehaceres...

-No estas estudiando... ¿Cuánto tiempo llevas sin estudiar?

-Dos años señor...- Sarabi le empezaba a dar pena decir cosas tan personales pero al ser su tutor no tenía más opción que decir la verdad

Maciel volvió a acercarse y con la mano derecha cuidadosamente tomó la barbilla de la joven y la jiro ligeramente, con esto la luz mostró un fuerte golpe en el ojo derecho

-¿Eres de esas personas que solo busca problemas?- esto no le gustaba para nada a Maciel

-Mi padre señor... hice algo que no debía y me castigó

Maciel soltó a la joven

-¿Qué hiciste?-Sarabi no sabía si decir la verdad, cosa que notó Maciel en un instante- regla numero uno, no decir mentiras.

Esto hizo que Sarabi tomara toda su atención

-Mi madrastra me daba dinero para comprar la comida de los siguientes días, yo gastaba lo necesario y lo que sobraba lo usaba para comprar flores para la tumba de mi difunta madre, se que es algo egoísta... sin embargo esa mujer tiene mucho dinero, gastaba todo en ropas y libros para su hija... todo de un seguro de su difunto esposo...

-¿Crees que es injusto que gastara el dinero en ella y no en ti?

-No es eso, me da coraje que mi padre nos dejo a mi hermano y a mi para darle toda la atención a esa mujer, yo quería que mi padre nos siguiera dando amor, sin embargo esa mujer siempre siguió a mi padre incluso cuando mi madre estuvo viva, mi madre falleció de una fuerte enfermedad y no teníamos el dinero suficiente para continuar el tratamiento... pero no fue necesario preocuparnos de eso porque ella no soportó la primera dosis... nos dejó a mi hermano menor y a mí con un hombre que solo estuvo de luto un mes y de ahí empezó a salir con mi 'madrastra'

-¿Alguna vez trataste de hablar con tu padre de tus emociones?... de como te sentías me refiero

-lo intenté, un día después de presentarnos oficialmente a la mujer, dijo que sería buena conmigo y mi hermano pero mi hermano era muy pequeño, yo le dije a mi padre que por obvias razones no quería otra madre pero el dijo que era lo que necesitaba porque estaba creciendo

-Eras muy pequeña cuando tu madre pasó a una mejor vida... Te diré algo-Maciel miró directamente a la joven- los hombres no soportamos estar solos, aunque nos cueste aceptarlo... Somos débiles y nos gusta saber que hay alguien con nosotros...

EL JUEGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora