Jamie & Jamie

5. Es mi secreto

¿Han escuchado alguna vez el dicho "Mantén a tus amigos cerca y a tus enemigos aún más"? bien, pues ese es justo el plan que tiene Cooper para nosotros, quiere que me acerque a Jamie más de lo que mi odio hacia la humanidad me lo permite. Cuando le conté que él me había invitado a una cita una sonrisa se asomó en su rostro y esta se hizo mucho más grande cuando le dije que iría (aun sin conocer mis planes de sábado) haciendo así su macabro plan mucho mejor y más eficiente de lo que él había pensado.

Ya es tiempo de que te vayas linda –me dijo rudamente mi amigo –le prometí a Luna que iría a su casa hoy.

¿Le has hablado? –pregunté sorprendida.

–No seas estúpida Jamie, ella me llamó llorando diciéndome lo que había pasado contigo y  tu amiguito.

Dile que no me arrepiento de nada –dije burlona –y que algún día lejano le perdonaré.

Me miró fijamente y entre abrió sus labios –Jamie, largo o llegarás tarde a tu cita –dijo soltando una carcajada.

Fruncí el ceño y bajé rápidamente por la cuerda hasta llegar al suelo del jardín –adiós Coop –dije finalmente y crucé la valla que dividía los jardines.

Jamie –escuché desde el interior de la casa –linda, soy mamá ¿Dónde estás?

Al escuchar a mi mamá corrí para entrar por la puerta trasera de la casa.

Linda –pronunció mi madre al verme – ¿Dónde rayos estabas escondida?

Estaba en casa de Cooper ¿Por qué? ¿Ha pasado algo malo? –contesté con naturalidad.

Quería que supieras que ya estaba en casa –dijo con una cálida sonrisa – ¿Dónde está Jamie?

–No lo sé mamá, cuando me fui él estaba aquí en casa.

Que extraño –dijo frotando sus brazos –habrá salido sin avisarte.

¿Quién sabe? –Dije elevando mis hombros –iré a darme un baño

Oh, Jamie, cariño –me llamó mi mamá antes de terminar de subir las escaleras –recuerda que hoy tienes visita donde tu padre.

Demonios, como lo fui a olvidar, ahora ¿Qué le diré a Jamie?

Aunque, podría llevarlo... no, no mala idea llevar al hijo del peor enemigo de papá a su oficina.

Ah, sí mamá, no lo olvidaría por nada del mundo –contesté y continué subiendo las escaleras.

Al llegar a la puerta de mi habitación escuché la particular y extravagante música que Jamie solía escuchar así que decidí cercarme a la puerta de su habitación un poco más.

Creo que me odia –escuche desde el interior de la habitación e hizo una pausa, creo que estaba hablando al teléfono.

Es decir, si, ha aceptado ir a la cita conmigo –dijo en con ilusión –pero creo que se trata de una vil broma.

Retrocedí unos pasos sintiéndome culpable y bajé con velocidad a la primera planta de la casa.

Mami –dije al pasar por la puerta de la cocina –dile a mi papá que no iré a visitarlo hoy –dije con pena jugando con mis pulgares.

– ¿Qué pasa linda? Siempre vas con ansias a visitar a tu padre.

–Lo que sucede es que ya he hecho planes para hoy y no los puedo cancelar.

Ah –pronunció mi madre con una sonrisa coqueta – una cita ¿cierto? ¿Quién es el chico? –dijo feliz.

Mis mejillas se tornaron un tanto rojas y pronuncié su nombre más hacia mis adentros que para ella –Jamie.