The Hunter 》Lysandro│cdm│

Capítulo 42: "Yo tengo que perdonar y él decidir"

Entonces estábamos ahí, mirándonos en silencio. Lysandro comenzó a avanzar lentamente hacia mí.

Parecía que el mundo entero había desaparecido, porque solo éramos él y yo, en ese momento.

Cuando Lysandro estuvo a cinco pasos de distancia, se detuvo, aún sin decir nada.
Yo lo miré con una expresión confundida... casi dolorosa.

— ¿A qué has venido? — Me atreví a preguntar.

Él no contestó, simplemente desvió la mirada y suspiró. Parecía estar inseguro e incluso algo perdido.
Después de unos eternos segundos, él respondió.

— No lo sé... — Fue apenas audible.

No esperaba escucharlo decir algo como eso...

Sin embargo, me quedé ahí, observándolo, esperando a que dijese algo que valiese la pena.

— Ya no sé qué es lo que quiero... realmente. — Prosiguió.

Giró un poco su cabeza, para mirarme, otra vez.

— Llegué hasta aquí... gracias a mis impulsos y emociones. Yo... nunca había actuado de esta manera. — Confesó.

No tenía palabras para las suyas. No tenía absolutamente nada que decirle...

— Yo... Chelsea... — Se tomó unos instantes para continuar. — Realmente tengo que hacer esto... — Sonó algo frustrado. — Pero, no puedo hacerlo si estas en medio... todo el tiempo.

Apreté mis puños y aguanté mis horribles ganas de gritar, pero no pude...

— ¡Adelante! ¡Entonces, dime que te irás, otra vez!

Su expresión cambió. Ahora lucía casi sorprendido, pero luchó por mantenerse neutral.

Lo sé... porque comienzo a conocerlo.

Nos miramos con la misma intensidad de hace unos momentos atrás. Tenía que ser fuerte y decirle...

— Pero si decides irte... — Continué. — No quiero que regreses corriendo con tu maltrecho corazón en la mano... — Soné casi molesta. — Simplemente... no regreses. — Ardía mi garganta, ardía mucho.

No podía creer lo que acababa de decir. Lysandro y yo estábamos muy sorprendidos por mis propias palabras.

A pesar de que doliera tanto... era lo correcto.

En ningún momento dejé de apretar los puños y él no dejó de mirarme.
Estaba luchando por contener las lágrimas.
No estaba dispuesta a llorar. No iba a llorar...

No voy a llorar, no esta vez...

Ya había llorado lo suficiente, como para romperme de nuevo... justo frente a él.

No sé cómo, ni de donde... pero agarré coraje y valor para continuar hablando.
No me iba a quedar con la inspiración en mi garganta...

— Así son las cosas, Lysandro. — Soné segura. — Te querré por lo que eres, si tú me quieres para todo...

De pronto, vi como él también apretó sus puños. Nuevamente desvió la mirada y cerró sus ojos. Parecía estar pensando y sufriendo... profundamente.

Mi corazón estaba latiendo demasiado rápido... tan rápido, que me sofocaba.
Mi garganta estaba ardiendo y mis ojos me estaban quemando.

¿Él también estará luchando contra sus sentimientos... o tendrá las cosas claras?