Ha pasado mucho tiempo, y como es de esperar, muchas cosas han cambiado. Ya no pienso en ti pequeña. Mi corazón ahora mismo baila al ritmo de una canción que apenas tiene sentido. Va cambiando de parejas. No sabe muy bien con quien baila mejor. Desea bailar con otros ritmos. Pero no pegan con este estilo de vida.
Se que te prometí eternidad, eternidad a tu son.
Pero tu canción ya sonó. Ahora sólo hay un mísero recuerdo. Como la canción del ascensor que siempre se te queda en la cabeza, pero no tiene importancia alguna.
También es cierto que me he vuelto más dura. No de fuerza, que va, ahí sigo siendo debilucha.
Me refería a que ahora intento que nadie me haga daño.
Ya que hace poco me han dañado. Estoy en reparación, y a la vez estoy floreciendo.
Estoy planeando cambios que se que no hare. Que nunca cumplire.
Los típicos propósitos de año nuevo, como ir al gimnasio, Te apuntas vas un día dos. Y después sólo pagas un importe sin sentido.
Pero creo que desde que te fuiste pequeña todo a ido a mejor.
Gracias por marcharte.
