Me despierto con una sonrisa. Ahora veo la vida de colores. No la veo en blanco y negro ni la veo rosa. La veo arco iris.
Entiendo que a veces nos deprimimos y todo nos parece horrible. A mí me costó dos meses enteros de depresión llenos de llanto y dolor hasta que volví a empezar a ver colores.
El dolor es inevitable y a la vez es pasajero. Una vez que pase el tiempo, todo, absolutamente todo, dejará de importar. Y algo muy importante es hacer cosas.
Un ejemplo: mi novio rompió conmigo y estuve en depresión por dos meses completos. Yo comencé a ser feliz a partir de este domingo en adelante. El domingo acepté que lo nuestro se acabó. El lunes fui a clase con una sonrisa y todo se me pasa volando.
Todo vuelve a recobrar un sentido. Antes, si lo veía, no era capaz de mirarlo a la cara. Ahora creo que sería capaz hasta de sonreírle. Todos somos iguales y no hay nada que nos impida disfrutar de este lindo día único y diferente al anterior.
Intentemos ver el lado positivo de las cosas. La vida es un regalo demasiado maravilloso como para desperdiciarlo.
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Me amo tal y como soy
No FicciónLa historia de como pienso recuperar la confianza en mí misma. Quiero aceptarme tal y como soy, ¿cómo planteo encontrar mi felicidad si ni siquiera soy feliz conmigo misma? Espero que este libro lleno de mis sentimientos no solo me ayude a mí, sino...
