Habían estado montando por horas, Hanna en la parte superior de su compañero intentaba mantenerse despierta a toda costa, mientras que Toothless tenía todo el cuerpo dolorido por haber estado tanto tiempo en el aire, ambos se encontraban sumamente agotados, deseando el encontrar por lo menos alguna pequeña isla para descansar unos momentos. Se habían alejado demasiado de Berk, al parecer también del archipiélago ya que no podían ver islas o otras superficies para establecerse.
Hanna ya estaba empezando a notar que estaba amaneciendo, por lo que parece que han estado volando entre cinco o mas horas. Ambos se encontraban sumamente cansados, mientras que Hanna intentaba no ceder al sueño Toothless se encontraba en la misma situación. Ellos creían que se zambullirían en el mar rápidamente si paraba o bajaba de altura tan solo un poco. Para su alivio pronto divisaron tierra, por lo que rápidamente se dirigieron al lugar.
-Vamos, Toothless- Lo alentaba Hanna. -Solo un poco más. Para su alivio Toothless no se detuvo e inclusive empezó a volar un poco más rápido con la poca energía que le quedaba.
Pronto aterrizaron en el pasto y al instante se derrumbaron por el cansancio, al instante sus párpados se cerraron y todo se volvió negro.
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La próxima vez que se despertó escuchó voces a su alrededor, no podía distinguirlas claramente,todas las voces sonaban lejanas y su mirada aún era nublosa, sin embargo, de repente recordó "Toothless" ella pensó antes de intentar salir de la cama con todas sus fuerzas.
Sin embargo, algo le impidió levantarse, o mejor dicho alguien. Al levantar la mirada pudo observar a un hombre mayor, de cabello castaño y ojos azules, y a su lado se encontraba una mujer con cabello castaño y ojos de un hermoso color verde bosque, los mismos que ella poseía. En el momento en el que observo a la mujer directamente pudo oír que su respiración se detenía, señalando al hombre a su lado le dijo algo que ella no pudo distinguir y el hombre se retiró. Cuando lo hizo, la mujer se abalanzó sobre ella, haciendo de esta manera fluir su larga trenza y su bello vestido verde.
-Mi niña...- lloraba la mujer mientras la abrazaba cada vez más fuerte.-Mi Hanna...- continúo la mujer.
En aquel momento la comprensión llego a los ojos de Hanna, y con la mano temblorosa separó a la mujer de ella y con la otra acunó su rostro. En ese momento pudo ver lo similares que eran, y con las manos temblorosas finalmente habló.
-Mamá?- ella dijo con la voz temblorosa. Mientras que la otra mujer simplemente asintió mientras una cascada de lágrimas descendía por sus mejillas.
En ese momento parecía que toda la tristeza de su vida se había desvanecido, ella simplemente la abrazó, más fuerte esta vez, no queriendo soltarla para comprobar que era real ,que no era un sueño.
Aquella noche, soñó en los brazos de su madre, la vida que nunca tuvo a su lado y la que podría empezar a formar junto a ella, desde este momento juntas.
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Como entrenar a tu Dragón: Nueva Vida.
RandomUnos meses después de haber derrotado a la muerte roja, Hanna Haddock, la hija del Jefe de Berk y la Conquistadora de Dragones, escucha a su padre hablando sobre el valor que tenía ahora que había derrotado a aquella salvaje bestia, diciendole que y...