Dia 14

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Pasamos todo el día ablando , nos contábamos anécdotas de nuestra infancia y nos reimos por horas ,  fue un momento muy bonito y para ser clara antes de irme me quise atrever a preguntarle lo que me aterrorizaba por meses si es cierto que le gustó y así fuerte cierto no se si es el elegido de el señor , pero cuando me acerque para despedirme y preguntarle me miró con esos hermosas  ojos azules y  no supe que hacer y  me congele quedé  atónita y sólo pude decirle que
« Dios te bendiga »
rápidamente me retiré del lugar y no sabía que más hacer , entre al baño y estaba sudando estaba  roja como un tomate jamás había sentido tanta pena

Mi mamá me esperaba en el auto y como me vio tan nerviosa me dijo la típica pregunta de madre « que tienes , te vez nerviosa »

cuando salimos del parqueadero nos encontramos con nada mas y nada menos que con la Pastora y Samuel subí la ventana lo más rápido que pude pero Samuel alcanzó a poner sus manos sobre el vidrio  y me dijo algo que me dejó desierto modo sin palabras

— que pasó te ibas a ir sin despedirte

Me sonrojo de nuevo yo que recuerde el decirle Dios te bendiga era como un adiós para mi , pero al parecer para el no abrió la puerta del auto para que bajara le dije «hasta pronto nos vemos otro día »   jamás podré olvidar como me abrasó y me dio un lindo y cálido beso en la mejilla somos amigos desde hace mucho tiempo y siempre nos despedimos de abrazó o de puño asta de un golpe en la cabeza pero nunca nos habíamos despedido de beso fue algo inesperado si estaba sonrojada casi me desmayo.

al llegar a casa
Lo único que  hice fue decirle al señor que me ayudará que no quería ilusionarme y que no sabía si Samuel era el indicado es mi mejor amigo lo consideraba un hermano pero ya no se realmente que siento por el

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