El principio del final

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Capítulo 15

Hong Kong

—la tenemos, al fin hemos logrado crearla— anunció Tian Ming sosteniendo una especie de carta entre sus manos, era negra con algunos detalles plateados, en el frente se mostraba la imagen de un esqueleto sosteniendo una guadaña sobre la palabra vida, al verla su compañero Zhou Yang se acercó a él con escepticismo en su mirada

—no luce muy impactante, ¿Cómo estaremos seguros que funciona? —

—será sencillo de probar, trae a tu hijo junto a uno de mis subordinados— soltó Tian sin darle importancia, el rostro de su cómplice perdió su color al escuchar esas palabras

—¿m...mi hijo?, ¿Por qué quieres hacerle eso?, ¿Qué pasara si la carta falla? —

—no te preocupes, no fallará, usando a mi subordinado, tu hijo volverá a la vida, no te preocupes, confía en mí y tráelo— Zhou Yang titubeo un momento antes de salir de la habitación, minutos después regreso acompañado de su primogénito Lao y otro sujeto

—señor Ming, mi padre dice que tiene algo que hablar conmigo— se acercó el hombre sin notar la cara de preocupación de su progenitor

—Lao, necesito que me hagas un favor, pero antes necesito hacerte una pregunta— dijo el autoproclamado líder del concilio acercándose a el —estuviste en el momento que tu padre asesino a Shang Li y tengo entendido que tu solías ser un muy buen amigo suyo, ¿Qué fue lo que sentiste al verlo morir? —

—lo único que sentí al verlo morir fue lastima, ustedes le dieron una oportunidad de unirse a nosotros, él fue un idiota al negarse, tuvo bien merecido lo que le ocurrió— respondió el aludido sin titubear, no podía dejar que su tapadera se descubriera, a pesar del odio que sentía por esos dos hombres

—¿lo ves?, te dije que mi hijo ya no sentía nada de afecto por ese sujeto— señalo Zhou tomando a su hijo por los hombros con firmeza, Tian sonrió acercándose un poco mas

—tienes razón, fui un tonto al desconfiar de tan leal joven, eso por eso que eres el indicado para esta tarea, necesito que hagas algo por mi— Tao miro al hombre algo confundido, pero asintiendo al final

—claro señor, ¿Qué es lo que necesita? —

—necesito que mueras Lao— antes de que el joven pudiera reaccionar a lo que escucho, Tian Ming le clavo una daga en la garganta, sus ojos se abrieron por la sorpresa, trato de decir algo, pero lo único que salió de su boca fue sangre, una vez Ming retiro el arma de su cuerpo, el hombre cayó al suelo sin fuerzas, y dando una última mirada a su padre antes de morir en ese lugar, Zhou Yang miro con horror a su cómplice, para después tomarlo por los hombros

—usa la carta, no quiero que mi único hijo muera, apresúrate—

—tranquilo, ya voy, tu, coloca esta carta en el pecho de su hijo, y no te muevas no importa que suceda, rápido— ordeno el líder de la familia Ming con calma dirigiéndose el asustado subordinado quien se había quedado de piedra al ver esa escena, asintió asustado, se acercó al hombre fallecido e hizo lo que le ordenaron, segundos después el hijo de Zhou Yang abrió los ojos llevando su mano inmediatamente a su garganta, sorprendiéndose al no notar ninguna herida

—esto es increíble, funciono, la carta de la vida funciono— exclamo Yang con sorpresa, su hijo lo miro confundido hasta ver el cuerpo de quien había intercambiado su vida por la de él, junto a una carta de color negro, quiso tomarla, pero Tian Ming fue más rápido arrebatándosela de los dedos

—te lo dije, con esto en nuestro poder, junto a nuestros subordinados seremos invencibles— afirmo el líder del concilio con superioridad, para después comenzar, a reír como un maniaco, risa a la que se unió Zhou Yang, gracias a que se encontraban distraídos no repararon en la mirada de odio que les dirigía el hombre que seguía en el suelo, comenzaba a comprender lo que había sucedido, por lo que una parte de él se estaba preocupando por ese suceso, mientras pensaba en cómo hacerle llegar esa noticia a sus aliados en Japón

La ultima batalla (Sakura card captor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora