Perfectamente Imperfecta

Capitulo IV

Sabia que en esta universidad me exigirían, pero pensaba que al colocarnos el trabajo para la petrolera Sabagh tendrían un poco de consideración por lo menos este mes, pero no fue así. Es el primer día y ya estoy hasta el tope de trabajo no se como lograre dividir mi tiempo entre mis deberes y el trabajar, pero de alguna forma tengo que hacerlo, tengo que aligerar la carga de mama en Venezuela.

Sarah me espera apoyada en el coche junto con una chica de tez morena, cabello llenos de rizos y curvas deslumbrantes.

-Hola -Digo en cuanto me acerco al par.

-Kiara te presento a Melanie, ella es mi mejor amiga de toda la vida, justo le estaba hablando de ti.

-Mucho gusto - Musitó tomando la mano que me ofrece para estrechársela.

Ella asiente mientras sonríe, pero rápidamente se despide y se va camino a un coche estacionado al frente. No se si le caí mal pero simplemente me encojo de hombros restandole importancia.

-Disculpala, ella es algo tímida y le cuesta socializar un poco, pero en cuanto se conozcan sé que se llevaran bien, es más se que no te conozco mucho pero lo poco que te conozco podría decir que te pareces a ella.

Asiento no muy convencida, pero sin tomarle mucha importancia, en este momento mi cabeza trata de organizar mi tiempo, según lo que me dijo Sarah el trabajo en la cafetería será de 2 pm a 9pm de lunes a sábado esto solo deja un pequeño tiempo entre la salida de la universidad y la entrada al trabajo para almorzar, y el resto de la noche para encargarme de los pendientes que me pongan en la universidad. Lo único que me consuela es que la paga es buena y me alcanzara para mis gastos y para enviar un poco a mi casa.

-¿Que tal tu primer día? - El sonido de la voz de Sarah me saca de mis pensamientos.

-Agotador, nos pusieron un trabajo de investigación para el 23 de este mes y a los 10 mejores trabajo le darán la oportunidad de estar en la conferencia de un importante petrolero, pero como siempre no todo es bueno y a las personas que hagan los trabajos que no tengan el nivel que buscan serán expulsados de la carrera.

-Vaya, eso suena como mucha presión para ser el comienzo.

-Lo es, pero estoy segura que puedo hacerlo. ¿Y a ti que tal te fue?

-Muy bien, ya yo conocía a mucha gente de que esta en la universidad por lo que no me sentí tan perdida y en cuanto a las clases exigentes pero soportables.

-Tu familia se debe mover en un circulo social de clase alta, porque por lo que se las inscripciones y mensualidades no son muy baratas.

-Así es, pero ese es el dinero de mi familia. A mi me gusta ser independiente- Dice esto ultimo con una sonrisa radiante, no tengo idea de como puede sonreír tanto y lucir tan feliz todo el tiempo.

-¿Sabes?, me gusta tu actitud y no le digo eso a muchas personas.

-Entonces debo estar agradecida, tu eres un poco gruñona pero también me gusta tu actitud.

Un par de minutos después estaciona frente a un café el cual supongo es de su hermano. La fachada es muy linda y acogedora te dan ganas y entrar y por lo que veo al entrar todo es mejor, un ambiente tranquilo e intimo se respira por todo el lugar junto con un olor delicioso que dan ganas de llevarse todo lo que se encuentra en el mostrador.

Las mesas están todas llenas y en cuanto nos acercamos al mostrador un chico de aproximadamente 25 o 27 años de tez bronceada, cabello rubio y ojos azules con harina esparcida por su delantal y mejilla.

-Gracias a dios que llegaste,¡esto esta a reventar!- Sus ojos se dirigen a mi y sonríe un poco apenado al no haber notado mi presencia antes- Disculpa, tu debes ser Kiara, ¿Verdad? Te daría la mano pero como ves estoy un poco sucio, Sarah sabe donde están los uniformes cuando haya un poco menos de gente hablaremos bien, ¡Mierda la pasta! - Sale corriendo por hasta la puerta de lo que supongo es la cocina y no puedo soltar una risilla por lo cómico de la situación.

-Disculpalo es que esta es la hora mas fuerte ya que aquí también se sirven almuerzos y uno de los cocineros esta enfermo, ven vamos a cambiarnos.

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Los pies me están matando, doy gracias cuando el ultimo cliente se va y al fin podemos poner el cartel de cerrado.

Todo el día estuvo entrando y saliendo gente ya que al estar en un lugar céntrico y cerca de una universidad mucha gente pasa por aquí, las propinas que me dieron son buenas, pero estoy hecha polvo y solo pensar que al llegar tendré que comenzar la investigación del punto que asignaron me dan ganas de morir.

-Hoy fue un día duró, hicieron un excelente trabajo. Kiara pasa a mi oficina para que firmes el contrato oficial- Lo sigo hasta una pequeña habitación a un lado de la cocina, al entrar tomo asiento en la silla frente al escritorio cuando este me indica.

-No nos hemos presentado como debería, mi nombre es Ethan Smith abrí el café&restaurante hace apenas un año y las cosas han salido muy bien por lo que no he tenido de que quejarme, abrir esto fue lo mejor que pude hacer, volviendo al punto como te pudiste dar cuenta las cosas por aquí son bastante ajetreadas, normalmente viene a trabajar otra chica más en el turno de la tarde pero tuvo una emergencia y le di permiso de faltar- Asiento en señal de compresión y mentalmente doy gracias de que hayan un par de manos extras porque hoy Sarah y yo casi no nos dimos abasto.

» El día de hoy te desempeñaste muy bien, y así como para toda gran exigencia hay una buena recompensa, ya que además del sueldo que es un poco mas del mínimo eres dueña de las propinas que te den- Eso me parece muy bien porque hoy conseguí 30 dolares en propinas y eso no esta nada mal- Aquí esta tu contrato durante 3 meses, luego del plazo cumplido tendremos otra conversación y decidiremos si lo renuevas o no.

Tomo el papel que me tiende y leo muy detalladamente el contenido, no es que desconfíe pero siempre me ha gustado estar muy segura de que es lo que estoy firmando, como dicen en mi país "Cuentas claras conservan amistades".

Al terminar de leer pongo mi firma donde me lo indica y asiento estando de acuerdo a lo que se estipula, tendré el día domingo para descansar.

- Estoy de acuerdo con todo lo que dijo, muchas gracias por la oportunidad.

-No hay de que.

Ambos salimos de la pequeña oficina y nos encontramos a Sarah medio dormida apoyada en una de las mesas y eso solo me recuerda lo cansada que yo también me encuentro.

Ethan toca su hombro y le susurra algunas palabras en su oído que la hacen despertar.

-Lo siento, es que estoy muerta, ¿ya nos podemos ir?

-Si

Tomo mi bolso del casillero que utilizamos para guardar las cosas personales y con un movimiento de mano me despido de Ethan.