Capitulo 3

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Quería pedir disculpas a todos/as los que hayan estado esperando el siguiente capítulo de la historia ya que dije que lo subiría por Navidad y pues al final no lo he hecho. He tardado más porque aparte de que no tenía mucha inspiración con los deberes exámenes y demás, quería hacerlo más largo como mucha gente me había pedido así que por favor disculpadme ;-; y espero que disfrutéis de la historia ^^.

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Leyna se sentía libre en lo alto de los árboles. Tan grata era la sensación que no se dio cuenta que había llegado al lago. Al no ver a nadie salió de las verdes copas que la ayudaban a hacerse invisible para muchos seres, miró al lago y no pudo evitar recordar cuando encontró aquel lugar.

"Una niña de extraña apariencia huía desesperada de aquellos hombres, los cuales ella creía que le harían daño.

Horas atrás habían comenzado a perseguirla por despiste al no darse cuenta que estaban ahí mientras intentaban cazar un ciervo. La pequeña niña estaba jugando con un cervatillo que andaba detrás de su madre, y sin darse cuenta se había puesto en el punto de mira de los cazadores.
"¿Por qué estoy sola?¿Por qué no hay nadie que me cuide?" se preguntaba a sí misma.
Estaba viva gracias a un viejo lobo que la había alimentado desde que la encontró en las raíces del árbol donde la dejaron sus padres.

Aquel lobo, aunque fuera un anciano, la protegió y enseñó a vivir en el bosque. Hasta que inesperadamente dos años y medio después, la niña de ya cuatro años de edad, encontró a su protector con una herido de no muy bien aspecto por lo cual no tardó mucho en fallecer.
La pequeña tuvo que empezar a velerse por sí misma desde tan temprana edad y buscar un nuevo lugar donde refugiarse.

Es entonces cuando buscando algún lugar donde pasar la noche se distrajo al ver el cervatillo y los hombres la comenzaron a perseguir.
Intentando despistar a los hombres y aprovechando su pequeño tamaño y su aspecto relacionado con el entorno corrió hasta conseguir subirse a un árbol. Al subirse a lo más alto y ver que se iban los cazadores, a lo lejos visualizó una cascada a lo lejos.

Y ahí se encontraba el lago que actualmente tanto apreciaba."

Mientras Leyna seguía metida en sus pensamientos, Connor rastreaba el olor de la joven. Cerca del lago por fin encontrado el rastro de quien con tanto ímpetu buscaba.
Con su hocico olisqueaba el aire y el húmedo suelo a toda prisa... Sabía que  ella estaba cerca por lo cual logró encontrar el árbol donde el olor era mucho más fuerte. Dio vueltas alrededor del tronco buscándola. No podía ver lo más alto ya que en su forma lobuna le costaba escalar árboles así que empezó a aullar intentando llamar la atención de su mate, aunque ella no supiera sus intenciones... todavía.
Tenía la intención de des-transformarse hasta que lo pensó detenidamente.
Los licántropos al des-transformarse quedan completamente como los trajeron al mundo, y por muy mujeriego que hubiese sido anteriormente, se sentiría demasiado avergonzado al estar tan "expuestos.

No sería muy buena impresión que digamos.

Leyna, que ya había dejado de jugar en su mente, prestó atención a los aullidos que se oían desde abajo. Poco a poco fue bajando no muy confiada, no solía ver lobos en su parte del bosque, aparte del que la cuidó, claro.

Se quedó observándole en la rama más cercana al suelo. Lo que lograba ver era un lobo negro como la noche un poco más grande de lo común.

La criatura llevó sus ojos a una rama justo encima de su cabeza.

Admiraba a una joven de piel amarillenta con unas extrañas marcas en la piel y una melena del color de las hojas de los árboles en esta estación primaveral. Connor nunca había visto una ninfa así que le sorprendió mucho su aspecto poco común.
Era una chica con el color aparente de la vegetación del lugar por lo cual suponía que podría quedarse quieta entre los árboles y no verla aunque estuviese delante suyo. Pero sabía que  la encontraría sin tener que usar sus ojos conseguiría encontrarla por la fragancia con la que sólo él se podía deleitar. El lobo retrocedió algunos pasos del árbol para demostrarle a la joven que no le haría daño.

Connor sentía un huracán de nervios en todo su cuerpo, lo único que quería era tirársele encima y que ella lo achuchara como a un cachorrito.

Leyna comenzó a bajar de la rama donde se encontraba para acercarse al animal que se encontraba delante, a su espera. Cuando llegó y pisó el húmedo suelo lleno de hierva y hojas caídas, se sentó sobre sus rodillas e hizo una señal con la mano para que el animal se acercara.

Me acerqué lentamente a la chica que tenía delante de mis ojos poco después de que me permitiera acercarme. Me quedé mirando fijamente los ojos al igual que ella los míos. Me recordaban al color del misterioso y profundo bosque, eran preciosos.

El azul eléctrico de él era absorbido por profundo verde de ella.

Extendió la mano para acariciar mi pelaje aunque lo hacía con temor a que saliera corriendo "¡Qué tierna!". Sin embargo moví mi cabeza hasta su mano e hice que apoyará su mano entre mis orejas y en ese momento me empecé a mover para que me acariciara. Ella fue cogiendo un poco de seguridad y me acarició con sus dos manos y después me estrechó suavemente la cabeza con sus brazos, era como estar en el paraíso, lleno de felicidad.

- Nunca había visto otro lobo- dijo la joven sonriendo melancólicamente.

Connor pensó en lo que había dicho "¿Conocía otros lobos?". En ese momento Leyna levantó con la intención de marcharse pero el animal que le llegaba poco más por arriba de la cintura, le seguía como si fuera una mamá pato a la que le sigue su patito. Pero no se lo impidió. De repente a Leyna se le ocurrió una idea.

- ¿Quieres echar una carrera?- Se quedó mirándole confundido y perdido pero para cuando se dio cuenta, ella ya había comenzado con lo tiempo atrás planteado así que salió corriendo en su busca.

Admiraba correr entre los árboles al igual que hacía cuando era pequeña, y ahora al parecer alguien quería pasar el tiempo haciendo lo mismo conmigo, así que estaba muy emocionada.
Para llegar a lo que consideraba su hogar, tenía que pasar por una zona, al este del bosque, donde solían haber muchos cazadores en primavera y desgraciadamente, estábamos en esa época del año.
Esperé a mi nuevo amigo cuando eso me dejó estupefacta.

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¿QUÉ CREÉIS QUE HA OCURRIDO PARA QUE LEYNA REACCIONE ASÍ?

¡¡¡Decírmelo en los comentarios!!!

Fin del capítulo. Para el siguiente intentaré con toda mi alma tardar menos en subirlo.

Y una cosita más, tengo algunos borradores de historias que he empezado. Si mucha gente dice que si subiré los principios de las dos historias a ver si os gusta ^^.

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He estado teniendo problemas desde ayer para subir el capítulo ya que o no me salía o había gente que no podía leerlo. Si lo podéis leer ya decirme por si lo tengo que volver a subir.
Muchas gracias por apoyar la historia.

BYE BYE!!!!

La Ninfa y el Lobo [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora