[12:00 a.m. miércoles]Ugh... ¿Que hora será? ¿Por que Teresa no me habrá levantado? Dejame mirar mi teléfono... ¿¡Las doce de la mañana!? ¡Mierda!
-¡Natasha!- le grite y empecé a moverla de un lado a otro.- ¡Natasha levantate!- le grite de nuevo y esta vez reacciono.
- ¡¿Que pasa, que pasa?!- grito asustada.
- ¡Son las doce de la mañana!- le grite y ella me fulminó con su mirada.
- ¿Y por eso me levantas?- me pregunto haciendo una mueca.
- ¡Si! ¡Marcos me lleva llamando desde las ocho y debe de estar muy preocupado y enfogonado! ¡Y no solo eso si no que no podemos faltar!- le grite parándome de la cama.
- ¿Y por que no?- me dijo acomodándose de nuevo en la cama.
-¡Natasha!- le grite fastidiada.
- Ugh... ¡Ya voy, ya voy!- me dijo mirando me mal.
-¡Avanza!- le grite mientras iba al baño a tomarme una ducha.
Al salir me encontré con que Natasha todavía estaba acostaba.
- Na...- empecé a decir pero ella me interrumpio.
- Lo se, lo se.- me dijo levantandose fastidiada y yo me fui a vestir.
Me puse un jumper de pantalon corto,una t-shirt blanca por debajo y me hize una coleta, que no me gusta hacermela mucho por que mi pelo es tan largo que pues no le veía la diferencia pero por lo menos estaba recojido. Salí corriendo a la cocina y coji dos tostadas para Natasha y para mi.
- ¡Natasha por Dios ya son las 12:40!- le grite de nuevo a Natasha.
A los pocos minutos escuche que Natasha venía bajando las escaleras.
¡Al Fin!
- Vamos a tener que ir caminando, Grayson se llevó el auto.- le dije caminando hacia la puerta.
- Genial.- dijo virando los ojos.
Habíamos estado caminando como por 10 minutos cuando nos encontramos con David.
Um ¿que?
- Hola Juvia.- me dijo David sonriendome.
- ¿Y tu que haces por aquí?- le pregunte fastidiada.
- Voy para mi casa ahora ¿te puedo preguntar por que no fuistes a la escuela y para donde vas?- me pregunto.
- No.- le dije y seguí caminando pero el me tomo por el brazo.
- No tan rápido amor.- me dijo al oído.
¿¡Amor!?... ¿Oye y a todo esto donde esta Natasha?
- Ugh, nos levantamos tarde y ahora vamos a la universidad ¿feliz?- le dije fulminándolo con la mirada y ahí me di cuenta de lo cerca que estábamos haciendo que no pudiera evitar sonrojarme.
- ¿Y quien es la otra persona?- me dijo tan cerca que sentí como su aliento acariciaba mi piel.
- N-n-natasha po-por supuesto.- le logré responder.