Narra Zabdiel:
La noche, callada y silenciosa. Fría y oscura. Este era mi hogar por las noches. Nadie conocía este lado de mí, nadie me conoce cuando estoy furioso, ni cuando debo hacer el trabajo....
Todos piensan que yo soy uno de esos niños buenos, pero se equivocan.
Saqué las llaves de mi Camaro del bolsillo izquierdo de mi pantalón y entré en él. Abrí la guantera que se encontraba en el lado del copiloto y cogí mi arma de 22 mm. Para guardarla en la cinturilla de mis pantalones, también cogí una bolsa de color negro de allí y la guardé dentro de mi chaqueta de cuero negro. Encendí el coche, procurando no hacer mucho ruido aunque fuera imposible y arranqué para alejarme lo más que podía de mi hogar.
Los caminos de tierra y piedras hacían que el auto se llenara de polvo y se ensuciara, aunque no me importaba demasiado. Lo único que tenía en mente era ir donde los chicos y yo nos habíamos acordado en juntarnos, a las 2:30 am. En el mismo callejón de siempre por la calle 714 de Camp Street. Debíamos reunirnos para así terminar de entregar algunos de los pedidos y terminar un ''pequeño'' trabajo.
Sonreí para mis adentros. Vería la cara de ese bastardo cuando le apunte con el cañón de mi pistola sobre la cien para acabar con su patética vida. Por un momento, recordé el miedo que veía en los ojos de _______ cada vez que me acercaba a ella; un miedo profundo, terror.
Cuando vi su moretón en su pómulo me extrañé demasiado. ¿Qué le habrá sucedido? Esta tarde, cuando me la encontré sentada bajo ese árbol, no logré ver si aún lo tenía, por lo que era más que seguro que había intentado ocultarse las marcas. También fue extraño habérmela encontrado sola, casi congelada, bajo ese árbol en medio de una gran ventisca y cuando me contó lo sucedido, no le creí. ¿Haberse perdido?
Negué para mí mismo. Encendí la radio en cuanto salí de los caminos de tierra y pasé a los de cemento. En la radio que tenía puesta estaban dando ''Demons'' de Imagine Dragons.
(...)
Llegué a la 714 Camp Street y luego de estacionar y apagar el motor de mi polvoriento auto, bajé con la bolsa de plástico negro y caminé hasta adentrarme en la oscuridad del callejón. Al llegar a una puerta verde, giré el pomo y entré. Respiré el aire con olor a cigarro y marihuana, ya deben estar todos aquí.
Me adentré más a la construcción que usábamos como base. El lugar estaba abandonado y nadie sospechaba que nuestro paradero era este lugar. Entré a la sala y vi sentados en el único sofá gastado qué había allí a los hermanos Camerón y a Jason Lodge, uno al lado del otro mientras ambos fumaban que se yo que cosa. Ambos tenían 17 años, eran los menores aquí con esa edad. Camerón y Jasón tenían el cabello negro hasta la altura de los ojos, liso. Jasón de ojos verdes y Camerón de ojos mieles. Los hermanos medían 1,80, los que le daba una edad mayor a la que tenían.
A su lado, estaba Austin Busher, el líder y el mayor de nuestra banda llamada ''The Black Wing'' (La Ala Negra). Tenía 20 años y medía casi los dos metros; 1,97 para ser exactos. Cabello rubio, tez blanca y ojos azules, atraía a chicas por montones.
Y parados a los lados del umbral de la puerta que llevaba a una habitación, estaban Joel Pimentel y Kyle Wells. Joel tenía cabello oscuro y ojos del color marrones. Un rostro delicado y con unos labios grandes, pero aún así las chicas lo encontraban atractivo. Era un poco más bajo que yo, al igual que Kyle. Joel tenía 18 y era mexicano, pero se escapó de la policía allí y llegó aquí, donde lo integramos a nuestra pandilla, mientras que Kyle tenía actualmente 20, al igual que yo. Él tenía el cabello de un fuerte rojo y usaba aros en los labios, nariz y orejas. Su tez era tigreña y un poco aceitunada en algunas zonas de los brazos y piernas. Todos tipos duros buenos para las peleas.
Lancé la bolsa sobre la mesa de centro que se encontraba allí y esperé allí, de pie alguna reacción antes de hablar.
— ¿Qué debemos hacer primero, mm? ¿Matar al bastardo de Alan y entregar el pedido, o entregar el pedido y matar al bastardo de Alan? —pregunté, mientras sacaba un cigarrillo del bolsillo de mi chaqueta y lo encendía con el encendedor qué estaba sobre la mesa. Inhalé una gran calada antes de expulsar el humo por mi boca.
—Primero... —habló Austin, mientras se levantaba y tomaba la bolsa para ver su contenido: Drogas —...Nos dividiremos. Tres irán conmigo a matar a Alan y tres irán a entregarle esto a Charles —nos miró a todos mientras suspiraba para volver a hablar— Zabdiel, Joel y Jasón vendrán conmigo. Los demás, tomen la camioneta y vayan a darle las drogas a Charles.
Él comenzó a caminar a la salida, obligándonos a seguirlo por la espalda mientras los otros tres se quedaban allí para esperar a que nos fuéramos. Le lancé las llaves de mi Camaro a Austin, quien las atrapó en el aire y nos subimos a este para partir en la dirección a la muerte de Alan.
Hola holaaaa ¿qué les pareció este capítulo? Qué tal la doble vida del Zab? 😏😂.
Coméntenme ustedes que piensan.
Gracias por esperar este capítulo
Nos vemos en el próximo
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Salvame
Fanfiction"Yo se como puedo salvarte" "¿Como?, Dime por favor" "¿Confias en mi? "Si, confio en ti" Nominada a mejor historia en XOXO AWARDS 2022