Capitulo 9

88 3 1
                                    

-¿Lilly?

Oh my god...

-¿Ah?, ¡Anda, hola Luke!, ¿Como tu por aquí?

-¿Eh?, Es que os he visto a tí y a Chris entrar y la curiosidad...- se sonroja y cambia de tema- ¿Y Chris?

-Me ha dejado tirada y no puedo pagar mi helado...

-Deja, que yo te lo pago.

-¿Enserio? ¡Muchas gracias!

Va al mostrador, se pide un helado de menta y chocolate y paga los dos helados. Eh, eh, eh.... esperad un segundito, el me paga el helado y se compra uno... seguramente nos lo comamos juntos... eso significa... ¿¡Una cita?!

Luke llega con su espléndida sonrisa que puede iluminar a toda una ciudad y se sienta en la silla que tiene delante mio, vamos comiendo en silencio, yo estoy temblando de la emoción y además nerviosisima, ¿Es una cita?, ¿Lo será para él?, ¿En qué está pensando?

-Lilly, -interrumpe mis pensamientos- ¿Tu crees que esto es una cita?

Un rojo más rojo que el rojo se apodera de mi cara, ¡Estamos pensando lo mismo!- vamos Lilly, idiota, contéstale- Calla subconsciente... ¡Cierto!

-P-pues, n-no sé...-no puedo controlar mi nerviosismo- ¿Para tí lo es?

Le miro y noto como esta un poco... ¿Sonrojado?, neh, seguro que es de la iluminación, sí será eso.

-Pues... supongo que sí.

¡Dios!

-¿Te parece si te acompaño a casa?

-¿No será una molestia para tí?

-Que vá.

-Entonces vale...- ¿Enserio? ¿Entonces vale? Dile algo más idiota- Y si eso podríamos tomar un café en mi casa...

-¡Me encantaría!

-Guay, pues yo ya he acabado mi helado.

-Y yo.

-¿Vamos?

-Usted primero- me guiña el ojo y me sonrojo- señorita.

-Muchas gracias caballero.

Nos empezamos a reir como locos en medio de la heladería, y la poca gente que hay nos mira como si estubiésemos locos, bueno... yo también haría eso la verdad...

Salimos de la heladería y caminamos poco a poco, me tropiezo con una piedercita de nada y me caigo-olé tu torpeza Lilly, te has superado- Luke se gira, se aguanta una risa y me ayuda a levantarme ofreciéndome la mano, se la agarro y me levanto, continuamos caminando pero... ¡Él no ha apartado la mano y estamos de la mano, caminando! Oh dios mío, ahora puedo morir feliz.

Cuando llegamos a mi barrio vemos a Candy saliendo de casa de Mark, de la rabia que tengo a esa niña apreto la mano de Luke y éste se queja

-¿Lilly? Me vas a dejar sin mano...

-Ups, ¡Lo sienro Luke!- le voy a soltar la mano pero él en acto reflejo me la coje- ¿Eh?

-He dicho que me apretabas demasiado, no que me soltaras.

Me sonrojo y Candy está en frente de nosotros, mira nuestras mano,  que ahora están entrelazadas y empieza a hablar.

-Amor, ¿Qué haces con la pringada de Lilly?

Perdona, ¿¡Amoor!?, me cago en todo, me siento frustada, enfadada, ¡ughhhhhhhhh!

Me suelto de la mano de Luke y me voy corriendo a casa, cierro de un  portazo, subo mis escaleras y me tumbo em mi cama y allí empiezo a llorar. No se cuanto rato ha pasado pero escucho mi timbre sonando como loco, bajo las escaleras a duras penas y abro la puerta.

Del odio al amor hay un paso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora