Corrigiendo al alfa. |VK

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El pelinegro suspiró rendido. Ahora sólo quería llegar y dormir. Después de ese largo y estresante examen, ¿quién no querría hacerlo?

Jungkook colocó sus audífonos y la música clásica comenzó a tranquilizarlo. Cuánto adoraba ese tipo de música, le parecía sumamente relajante.

Acomodó su corbata y miró con detenimiento su edificio. Muchos compañeros estaban igual o peor de cansados. Caminaban como auténticos muertos vivientes y tenían unas notables ojeras.

-¡Hey!-El pelinegro miró al beta que le había quitado los audífonos.

-¡Olvidaste llamar! ¡¿sabes lo preocupado que estaba?!

Jungkook abrió un poco su boca formando una "O". Demonios, lo había olvidado por completo. Ahora no se salvaría del regaño por parte del mayor, porque una vez que Kim Seokjin se enojaba no podías pararlo.

-Lo siento tanto, papá-El de cabello rosa fulminó con la mirada al menor.

-Deja de burlarte, mocoso.

Jungkook inevitablemente rió ante la fea mirada que le dedicaba el mayor.

-No quiero que vuelva a pasar esto, ¿está bien?-Jin miró al menor y posó su mano en su pecho-. ¿Acaso sabes cómo me quedé? Estaba muy asustado. Quiero que me llames cada que puedas, ¿bien?

-Bien.

-Perfecto, tengo que dar clases en unos minutos-El mayor fijó su vista en su reloj de mano-. Te veo después, hermanito.

-Adiós, señor.

-Deja de ser tan bobo-Jin rodó los ojos y rió-. ¡Oh, por cierto! Tenemos que ir el fin de semana con papá y Hyuna.

Jungkook asintió y tomó nuevamente su camino al dormitorio.

Al llegar abrió su puerta que mostraba el "131 C" pegado simétricamente. El pelinegro suspiró y quitó sus zapatos para tirarlos a donde sea que fuera. Dejó sus cosas en la mesita de noche y se tumbó sobre el sofá cama.

Sentía que de alguna manera necesitaba descansar, había estudiado sin parar desde hace dos meses atrás. Jungkook era el primero de la clase, era un chico muy responsable y ordenado. Realmente odiaba que las cosas salieran mal, no soportaba el ruido, y mucho menos a la gente ruidosa. Le gustaba el silencio, pero cuando tenía que hacer algo le gustaba poner música clásica.

Jungkook suspiró y tomó sus cosas para llevarlas a su habitación. Caminó rendido, pero al menos una buena nota le diría que su gran esfuerzo valdría la pena.

Al pasar por el pasillo que daba a las habitaciones pudo observar que la puerta junto a la suya estaba abierta.

-¿Pero qué..?

Juraba que estaba cerrada, Jungkook negó y tomó el pomo para cerrarla. Su antiguo compañero de departamento se había marchado -puesto que era un omega de último año-.

El omega entró a su habitación y se recostó en su cama. Pocos minutos después quedó profundamente dormido.

🔹🔸🔹🔸

Un ruido irrumpió el relajante sueño del chico, rápidamente apagó su despertador y tomó sus lentes de la mesita junto a él. Jungkook suspiró, ya era hora de darse un merecido baño de burbujas. El omega se levantó de su cama y caminó hasta la sala, puso un poco de música clásica mientras miraba al chico de espaldas sentado en el sofá...

Wow, paren el carro... ¡¿UN CHICO?!

-¡Oh, has despertado!

El pelinegro abrió sus ojos a mas no poder, ¿qué demonios sucedía?

-¡¿T-tú quién eres?!-Preguntó el omega aferrándose a su teléfono.

El castaño ladeó su cabeza y se levantó de su asiento. Jungkook pudo darse cuenta de que aquel intruso era un alfa con complejo de vándalo.

-¡Dios! ¿dónde están mis modales?-La grave voz del castaño erizó la piel del menor que chilló al sentir que aquel alfa se había abalanzado a abrazarle.
Jungkook quedó mudo, el olor tan potente aturdía su cabeza. Aquel alfa estaba feliz, su casi chocante olor a café lo delataba.

-Soy Kim Taehyung, tu nuevo compañero de departamento.

Y sólo eso fue suficiente para que el omega quisiera correr lejos y refugiarse con su hermano mayor.

-Yo... ¡¿qué?!

-¿No te lo habían dicho? ¡oh, Dios! Seguro soy un intruso para ti.

El castaño tocó la frente del contrario y suspiró aliviado al darse cuenta de que no había causado daño mayor en el omega.

-Bien, empecemos de nuevo. Soy Kim Taehyung, tu nuevo compañero de departamento. Soy un alfa de último grado que apenas hoy retomó las clases en esta Universidad, siento si te causé un susto. ¡Lo siento tanto, y por favor no me mates!.

La expresión de horror por parte del castaño valía oro, ¿cómo un alfa podía ser de esa forma?

Se suponía que ellos eran imponentes con un carácter aterrador. El chico de nombre Taehyung era cómo un auténtico callejero, tenía una perforación en la oreja, vestía con colores oscuros y una chamarra de cuero con botas militares que para nada combinaban. Pero su actitud no favorecía esa imagen de bad boy.

El pequeño omega estaba un poco confundido, pero por temor a que el contrario le hiciera algo era mejor dar una respuesta inmediata.

-B-bien, Kim. Soy Jungkook, Jeon Jungkook.