En Silencio (pearlmethyst)

"Secretos"

La noche continua y la luna había llegado a lo más alto del cielo, anunciando la media noche, perla que aun intentaba dormir, termino por rendirse, abrió los ojos y miro a amatista que se había acomodado entre sus piernas, se ve tan cómoda, pensó perla lanzando un suspiro al aire, ¿cómo puede dormir así? ella que ya lo había intentado no pudo, entre más lo intentaba solo veía atreves de su mente recuerdos de la cruel y vil guerra, era una pesadilla total, no podía permitirse recordar algo así, por lo menos no con amatista entre brazos; perla se quedó mirando el templo hasta el amanecer, no quería despertar a la pequeña que reposaba en su regazo, cuando el sol comenzó a iluminar el templo amatista comenzaba a despertar, lo primero que vieron sus ojos fue la enorme nariz de perla.

- ¿qué haces? - le dijo con brillo en los ojos, dignos de una niña recién levantada.

la pálida la miro con una ceja arqueada, no entendía muy bien por qué le preguntaba eso, a decir verdad, no esperaba que le dirigiera la palabra.

- esperaba a que despertaras - le dijo con una sonrisa a medias.

la más pequeña se quedó viéndola un momento más, los ojos azules de perla brillaban con intensidad, no se sabía si era por el sol o porque le daba ilusión ver a la pequeña.

- disculpa, no quería molestarte - amatista desvió la mirada con pena, sus mejillas comenzaban a arder junto con ellas sus pequeñas manos inquietas no sabían ni donde estar, no había notado la posición en la que estaba, perla la tenía entre brazos, le dio tanta pena y vergüenza que termino estirando los brazos separándose de la cara de perla, termino cayéndose de espaldas y golpeándose la cabeza.

- ¡por mis estrellas! ¡¿estás bien?! - apenas la vio perla se acercó a ella de inmediato - ¿porque hiciste eso?

amatista no dijo nada, lo único que pasaba por su mente fue la vergüenza que acaba de pasar, pero al mirar a perla lo único que sintió fue su cara arder sobre todo la zona de las mejillas, cerró los ojos como intentando ocultar el estado en el que se encontraba, apenas sintió que perla la intento levantar, le golpeo la mano, se levantó con desesperación y salió corriendo hacia la playa, la ojiazul solo se quedó viendo la dirección por la que salió amatista, no entiendo muy bien lo que acababa de pasar, solo termino suspirando con algo de cansancio.

amatista corrió hasta que salió de la playa y entro a la ciudad, se detuvo entre un callejón, se quedó ahí intentando recuperar el aliento, ¿que había pasado? fue lo primero que paso por su mente una vez que se tranquilizó, pero no lo sabía, lo único que sabía era que no pudo evitar correr, solo quería huir de esa situación y de la vergüenza que eso le causaba.

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ya había pasado unos días, perla seguía tan normal, incluso para ella era algo extraño, solo se dedicaba a salir con garnet a misiones, en cambio amatista solo se la pasaba en la playa, no le gustaba estar en el templo y menos ahora que había hecho una amiga, era la tan llamada vidalia, prácticamente amatista solía irse con ella la mayor parte del tiempo. perla solo la veía entrar y salir, le intrigaba saber que tanto hacia, ya que amatista mantuvo en secreto la relación con la humana, supuso que era lo correcto, después de todo un humano les había arrebatado a rose, no sabía si aprobarían ese comportamiento y para evitarse problemas simplemente decidió ocultarlo, pero un día perla decidió interrogarla.

- ¿a dónde vas? - le dijo sin quitarle la mirada de encima, casi ni parpadeaba.

amatista que salía de su habitación con un zapato en mal estado solo la miro.

- ¿y bien? - le dijo una vez más, ya que la pequeña solo la miro como intentando entender a que se refería.

- voy a la playa - dijo quitada de la pena y comenzó a caminar hacia la salida, pero perla no contenta con la respuesta le impidió seguir avanzando - ¡hey! - le dijo con algo de enfado - ¡déjame pasar!

- no es de mi agrado que mientas y lo sabes - la miro con el ceño fruncido.

- no estoy mintiendo, vamos voy tarde... - intento pasar por encima de perla, pero esta la detuvo de los hombros.

- ¿tarde para qué?

- ese no es asunto tuyo - la pequeña intento golpear a perla, pero esta la detuvo antes de que intentara hacer algo, el tomo de la mano y le soltó un leve golpe en ella, amatista la miro con los ojos llorosos, parecía que iba a llorar en cualquier momento.

- ¡no me mires así! ¡tú te lo ganaste! - dijo sin soltarla, por una extraña razón se sintió culpable por golpearla, amatista intento liberarse del agarre de perla, mas no lo logro - deja de luchar conmigo, soy más fuerte que tú y lo sabes - le dijo.

- ¡suéltame! - grito con fuerza.

- ¡no! - le respondió - ¡solo tienes que decirme a dónde vas y te soltare!

ahí se encontraban las dos, gritándose entre sí, garnet que se encontraba dentro del templo le pareció extraño escuchar gritos, con algo de intriga salió a ver qué pasaba, fue cuando vio la escena, perla sujetándole la mano de amatista y está gritando con los ojos llenos de lágrimas, hace tiempo no las veía discutir de esa manera, de alguna manera extraña estaba feliz por verlas discutir, pero era momento de intervenir, ya que parecía que en cualquier momento iba a empezar a golpearse.

- ¿qué sucede? - dijo de lo más normal.

- ¡garnet! - perla que apenas la vio comenzó a quejarse - ¡amatista no me quiere decir a donde va todos los días! - lo dijo como si hiciera berrinche a garnet le causo gracia ver algo así.

- ¡no es asunto tuyo! - dijo la pequeña aun intentado liberarse de perla.

- ¡calla! ¡no te soltare hasta que me digas!

- ¡gems! - grito garnet con fuerza, eso llamo la atención de ambas - perla suéltala.

- pero garnet - después de ver a garnet simplemente la soltó, amatista solo salió corriendo después de eso - ¿no te preocupa? - le dijo mientras miraba por donde se había ido.

- claro - le dijo acercándose a ella- pero debes entender que amatista no le gusta estar aquí, no la puedes obligar a hacer algo que no quiere.

perla solo se quedó callada al escuchar eso, no le agradaba la idea, pero al parecer no tenía opción, aun así, no podía evitar el preocuparse, no sabía porque, pero no podía evitarlo, no le dio mucha importancia a decir verdad y aunque inicio por dar una caminata por la playa, termino caminando por las calles de la ciudad buscando a amatista.

llevaba horas buscando entre las calles, hasta que finalmente la vio salir de una casa, se veía feliz riendo con una humana, perla no parecía entender al principio de que se trataba, hasta que la vio abrazarse a ella, después de eso la pequeña había salido corriendo, ¿es ahí donde se mete todo los días? pensó, pero el pensamiento le pareció insano, no puede ser, dijo para sí misma, siguió a amatista desde lejos, se dirigía al templo feliz de la vida, perla solo caminaba en silencio con la cabeza baja mirando el piso, pensando en lo que acababa de ver.

cuando llego al templo vio amatista jugar con garnet, no sabía si decirle a garnet o guardar el secreto...

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¡Hey! Espero te haya gustado,
Gracias por leer.

Chao chao
💙