Mi vida cambió por tu culpa

Un extraño sentimiento

maldita sea, Wiss llévatela de una buena vez- dijo Bills muy molesto, mientras tanto la  pequeña se encontraba en los brazos de wiss llorando por el gran grito que pegó la deidad- se adueñó de mi cama y de mi espacio personal!!!- dijo Bills apuntando a la profanadora

Wiss: señor Bills no cree que exagera un poquito, asustó a la pequeña

Bills: asustarla!!! Esa mocosa se esta adueñando de mi planeta

Wiss: eso no es verdad, pero si tanto le molesta su presencia, puede destruirla con tan sólo un suspiro

Bills se quedó en silencio mirando a la pequeña que no dejaba de sollozar en los brazos de wiss- por lo que veo sólo tiene dos opciones, destruirla o aprender a convivir con ella por  ahora creó que le debe una disculpa- dijo wiss dejando a la pequeña en el suelo frente a Bills

Bills: ¿disculparme? ¿Por que yo? Ella se metió en mi cama

Wiss: la asustó al borde del llanto, una disculpa podra apaciguar la

Bills dio un suspiro y una mueca de desagrado, se inclinó para estar a la altura de la pequeña- pe...perdón - la pequeña lo miró aún con lágrimas en los ojos y lo abrazo para seguir con su llanto- lo siento, lo siento- dijo la pequeña sin parar de llorar

Wiss: parece que todo esta arreglado...prepararé el desayuno

En la mesa hubo un silencio muy incómodo por parte de Bills y la pequeña- cuando acabe de comer mi señor lo espero para seguir con el entrenamiento- dijo Wiss retirándose  de la mesa

Bills: maldición...oye mocosa, por que te metiste a mi cama anoche -La pequeña se quedo callada, mirando muy apenada a Bills - ya no importa, apresurarse porque también a ti te toca entrenar

Otro día duro, otro entrenamiento agotador para Bills y para la pequeña, un día largo para ambos y el inicio de una noche sin poder dormir para uno. A la mitad de la noche la sed invadió la garganta de Bills, algo molesto para el levantarse y tener que ir hacia la cocina, pero  en su largo trayecto  se detuvo escucho lamentos provenientes de la habitación de la pequeña, se notaba a simple vista el sufrimiento y el terror de las pesadillas que la atormentaban, despertando la de  un sobresalto 

Bills: ahora comprendo...tu dolor te atormenta por las noches

Namy: te-tengo miedo

Maldita sea, por que nunca me das opción- Bills se dio media vuelta y empezó a caminar hacia a la salida- solo por el momento en que te encuentres aquí  te dejare que duermas a mi lado

La pequeña con una gran sonrisa en su rostros seco las lágrimas y salio de la cama siguiendo a Bills