4.-Decoración del hogar

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18 de Diciembre

Miró nuevamente el lugar en el que estaba, bufando por lo fastidioso que era estar en aquellas fechas. Creyó que con haber comprado las cosas de decoración y otras tonterías, las cosas pararían y Ccino se quedaría tranquilo como de costumbre...

-Nightmare, ¿podrías pasarme esa bolsa de esferas?- Ccino se estiró y señaló para el contrario, a una bolsa que estaba a un lado de su sitio. El guardián vio sin interés la bolsa, y con uno de sus tentáculos se la acercó al dueño de aquel lugar. -Muchas gra- espera!- Al intentar tomar la bolsa, ésta se alejo a la misma velocidad a la que había llegado, acabó por casi resbalar y tener que sujetarse de la guía que estaba por arriba en las paredes. Volvió a ubicarse en la escalera y miró al contrario con una cara ligeramente molesta.

-¿Qué? Me pediste que te los pasara, bueno. Ya pasaron a un lado tuyo.- Dijo con una sonrisa divertida y ligeramente maliciosa.

El contrario suspiró y negó divertido. Acomodó el poco desorden que había hecho por sujetarse, y volvió a pedir que le "diera" las esferas, cosa que esta vez sí hizo bien el contrario. Mientras que Cappuccino se encargaba de arreglar las esferas para que quedara un lindo decorado, Nightmare veía con desconfianza la taza de café que le habían servido cuando llegó, después de la hora de cierre. Después de lo ocurrido la otra noche, con su acercamiento hacia el barista que estaba en el mismo pasillo que él, había tomado desconfianza por aquella bebida... Capaz que después le haga meter los tentáculos donde no debería. Al menos no le llamaba la idea de hacer desastres en ese universo por ahora.

Había creído que por lo tarde que era ya, sólo vería a Ccino un tiempo en lo que éste se iba a dormir, pero grande fue su sorpresa de encontrarse ahora con aquel barista, apresurándose por arreglar lo que faltaba del hogar del mismo. El segundo piso de la cafetería como tal. Miró que ya casi acababa de decorar la parte superior. Toda aquella guía de color verde pino, decorada con bastones rojos, amarillos y azules, esferas todavía más surtidas y pequeñas, y otras figuras de copos de nieve blancos con bordados azules, que no le dejaron tocar pues al ser tela, la ensuciaría con facilidad, entre más cosas...

Ahora era que caía en cuenta... ¿Qué clase de detergente tenía el dueño del local, como para evitar que sus manchas de ese líquido negro, se quedaran casi impregnadas? Otro de los tantos enigmas sin importancia que le tenía a ese sujeto.

Miró por debajo a los felinos. Algunos jugaban con las esferas más grandes, mientras los restantes se escondían en las bolsas o paquetes donde venían también una serie de luces. Otros estaban más tranquilos durmiendo, y algunos más parecían autos de carrera al correr entre ellos y perseguir una esfera prófuga de sus garras... ¿Cómo el menor toleraba esto?

-Eso es todo de aquí.- Dijo para después bajar. Se colocó a mitad de la sala y miro como quedó cada parte, incluida la cercana donde estaban las habitaciones que ya no se usaban. -...Me parece bueno, ¿tú qué dices?- Preguntó al esqueleto a su lado, quien sólo miró de momento los adornos y bufó. -Me alegra que te guste.- Le sonrió con calma para después ver el desastre de los felinos.

-No sé qué ganas con esto. De todos modos los vas a quitar en menos de un mes.- Dijo de mala gana. No entendía el porqué del esfuerzo por algo que se terminará olvidando a penas pase para lo que sirvió.

-Lo sé, yo tampoco lo entiendo... Pero es una costumbre.- Completó el más bajo, tomando una caja más grande que su tamaño y tirando de la misma con dificultad.

-... Ha!, hasta para eso eres un debilucho.- Se burló el más alto, caminando a donde estaba este.

-No es tan ligero como crees.- Respondió el barista para después volver a jalar de la caja en dirección a una de las esquinas de la ahora ampliada planta alta.

Reto de 10 Dias para la Navidad. (FluffyNight)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora