Polos Opuestos

Capítulo 4

El sonido del timbre me despierta, me dirijo hacia la puerta con las manos en los ojos tratando de despertarme. Abro la puerta y lo miro de pies a cabeza y era él, si el. Derect con una pizza en mano y en la otra dos cervezas:

Pasa - le digo - Eso planeaba hacer - me responde acompaña de una risa traviesa. Era tan lindo, aun no me explico como de lo detestable que lo sentía puedo haber pasado a ser un chico al que ahora no puedo dejar de pensar. Caminando atrás mio se sentó en el mueble donde empezó a destapar las cervezas, es cuando le dije - Lo siento, pero yo no tomo. El me miro con los ojos tan abierto que después soltó una risa, que se escucho hasta el piso de abajo.

Enserio no tomas - dijo

NO! no tomo, ¿por qué no me crees? - lo dije con un poco de fastidio

Okay, lo siento, si te creo. Solo que es la primera vez que conozco  una chica que nunca a probado cerveza en su vida - lo dijo tan sincero mirándome a los ojos, que le creí.

Voy camino a la cocina para sacar una gaseosa de la nevera, ya que eso nunca faltaba. Era esencial para mi, me gustaban demasiado que no podía falta una en mi cocina. Después de ir por la gaseosa me siento en le mismo mueble que el y echamos a conversar, se nos paso la hora platicando que cuando terminamos la pizza recién nos habíamos dado cuenta que ya era muy tarde; veo el celular y ya faltaba un cuarto para las doce. Me paro del mueble y le digo:

Ya es tarde y aun no e alistado mis cosas para mañana - se lo dije con un poco de pena, sabiendo que el se podía fastidiar pensando en que ya quería que se valla, pero no era así, solo que en verdad ya era tarde y ni siquiera sabia que ropa iba a ponerme mañana para ir a la universidad.

Él solo se paro me miro y dijo - No te preocupes, yo también ya debo irme, debo hacer unos asuntos para mañana - A lo que solo le respondí con una sonrisa tímida. Lo acompañe hasta la puerta, se dio la vuelta me miro de nuevo y me dio un beso en la frente, yo que sepa el beso en a frente significaba que la otra persona iba a estar siempre ahí para protegerte, aunque pensando lo bien un chico como el no creo que tenga el mismo concepto que yo. Vi como entro a su departamento y cierro la puerta.

Empiezo a dejar mi sala como estaba esta tarde antes de que venga Derect con su pizza y cervezas, solo para darme la bienvenida al edificio, pero siento que solo fue un pretexto para tomar. Apago la luz de la sala y me dirijo a mi habitación, me saco la ropa y la dejo en el cesto. Estaba tan cansada que solo me puse un polo largo y me tire a mi cama diciéndole que la extrañaba. Yo sola me pongo a recordar lo que acabo de decir y me río entre mis almohadas, pongo el despertador una hora antes de lo común, solo porque tenía tanta pereza de volver a levantarme y alistar mi ropa, mi bolso, mis libros y el maquillaje que iba a usar mañana, soy de esas chicas que solo usa brillo labial y se riza las pestañas. Mi maquillaje es tan sencillo que eso era lo que menos me preocupaba.

Pongo mi mirada en el techo blanco pero luego la desvío para ver la luz de la luna que entraba por mi ventana, estiro mi frazada hasta mi cuello y cierro los ojos.