¿Qué Sucedió? (Adexe Y Nau)

Cap 30: La Veo

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Narra Adexe:

Invite a Lauren a mi casa, Nau y Sol se fueron a su casa y llevaron a George para que juegue con Mía.

-Te entiendo, yo a mi Mía la veo en todas partes y jamás me olvidaré de ella-Dije sonriendo

-Entiendo que tú ya lo superaste de cierta forma, Yo quede sola Adexe-Salieron lágrimas de sus ojos-Aún recuerdo cuando ambos soñabamos con tener hijos y una casa en el campo, él con su bella sonrisa diciéndome que jamás me dejaría

-Mira Lauren, yo sé que es difícil, pero créeme que él quisiera que estés bien y feliz-Dije

-Yo jamás volveré a ser feliz Adexe, jamás sabré que es sentirse viva nuevamente

-Sí, ya verás que sí, quizás conozcas un nuevo hombre que te de la misma felicidad y cariño que te dió Ernesto-Dije mirándola

-¡No!, jamás volveré a casarme de nuevo, no traicionaré a Ernesto...Perdón Adexe, pero debo irme-Dijo agarrando su bolso y saliendo de la casa

-¡Lauren, siempre estaré aquí, si algún día quieres volver!-Grité

Y ví que se fue.
Entiendo su dolor, yo también lo he sentido alguna vez.

Miré al patio y de pronto Mía apareció.

Se encontraba mirando las flores de mi jardín, de pronto me miro.

-Adexe, te amo-Dijo y me sonrió

-Yo también-Dije sonriendo

Me tiro un beso y desapareció, siempre que me sentía triste, su imagen aparecía y siempre me decía lo mismo, "Adexe, te amo".

Mía Fernández, siempre te amaré.

En eso veo a una mujer de mi edad con una cámara, tomando fotos a las flores de mi jardín, justo donde vi a Mía.

Se percato de mi mirada.

-Hola-Dijo sonriendo

-Hola-Dije sonriente

Narra Nau:

-Sí Adexe sólo supiera la verdad-Dijo Sol suspirando

-Él no debe saberlo, sería capaz de matar a Ariann-Dije suspirando

Mía no murió en ningún accidente, ósea si lo tuvimos pero ella sobrevivió, unos días después Ariann fue a visitarla al hospital y la mató.
Desde estonces, ella esta desaparecida.

-Pobre Mía, pensar que ella estaría aquí con nosotros-Dijo Sol llorando

Me acerqué y la abracé.

-Ella siempre estará con nosotros-Dije acariciando su cabello

George y Mía aparecieron.

-Papá, unos señores te buscan-Dijo Mía

Sol me miró extrañada.

-Iré a ver-Dije

Salí y sí, efectivamente un grupo de hombres y mujeres me buscaban.

-¿En qué puedo ayudarlos?-Dije

-Venimos a dar nuestro pésame a ustedes, Mía Fernández era una gran chica, fue compañera nuestra, tan sólo tenía 16 años, tenía tanto por vivir-Dijeron llorando

-Gracias, ¿Quieren pasar?, adentro esta mi mujer, Sol Haack-Dije sonriendo

-¡Solcito!, como olvidarnos de ella, mejor amiga de Mía-Dijo una mujer del grupo