-Hola- dije haciendo señas con los brazos. El auto de policía se paro y enseguida salió un hombre pelirrojo con un bigote raro.
-Señorita ¿Se encuentra bien?- dijo Tomando mi brazo. Apenas escuchaba lo que me decía pues mi respiración era muy fuerte, cada vez me deshidrataba más.
-Sí...- pude decir.
-¿Dónde vive?- dijo recargándome en el cofre mientras abría la puerta de atrás.
-Street #21- dije entrando al auto.
Puso el auto en marcha y gracias a dios salimos a carretera.
-¿Qué hace usted por acá?- dijo con un asentó raro.
-Caminaba.
-Sí lo note- se burlo.
-Camine y camine así que me perdí- dije asintiendo.
-¿Camino con ese vestido, esa pansa de embarazada, ese maquillaje y ese peinado?- dijo mirándome por el espejo.
-Algo así.
-Algo así ¿Eh?- dijo mordiendo el palito de madera que sostenían sus labios.
-Ajá- dije asiéndome pequeñita, pequeñita en la parte de atrás.
-"Tenemos una alerta ambar a todos nuestros ciudadanos, _______ Heaven Wathson se extravió esta noche mientras cenaba con un amigo, llevaba puesto un vestido negro, mide más o menos 1.67 y tiene 3 meses de embarazo... Su papá y su prometido Zayn Malik ofrecen una valiosa recompensa a quién la encuentre, esperemos la hayan visto...¡Muy bien son las 11:30 de la noche y...!- La estación de radio ha hablado.
-Así que ¿A caminar?- dijo el policía con una ceja levantada.
Sólo hice el intento de una sonrisa y me hice aún más pequeña. Prometido ¿Eh?
Ahora mi prometido era Niall, no ese... patán.Llegamos a la estación más cercana, me baje junto con el oficial que entro a su oficina a reportar que yo ya estaba aquí. Me sentí en un banquito azul que estaba en medio de la sala y suspire hondo.
-No creí que eso de; "Disfrutare al máximo mi soltería" fuera TAN en serio- susurre.
Como 80 autos se estacionaron afuera de la oficina y entro papá, Kenya, Louis, y... Él, por la puerta.
Zayn y yo nos miramos y las lágrimas comenzaron a salir, aparte la mirada de sus ojos ya rojos y los cerre.
-____...- susurro acercándose a mí.
-No- dije haciéndome a un lado.
-¡Mi amor!- me abrazo tan fuerte. Mis lágrimas brotaban como dos mangueras rotas- No sabes como te extrañe por favor... perdóname por lo que más quieras, perdóname- dijo hincándose ante mí. Negué con la cabeza y lo ayude a pararlo.
Mire hacia atrás y mire que Kenya lloraba como Magdalena. Casi vuelo para abrazarla a ella y a papá.
-Ven acá maldita zorra- dije susurrándole por el oído.
-Te amarrare, lo juro que lo hare- dijo llorando.
-Aquí esta su recompensa- Dijo Zayn al oficial dándole un cheque. El oficial río y negó con la cabeza.
-¿Lo quiere en efectivo?- pregunto papá sacando la cartera.
-No, no. Es mi deber ayudar- dijo sonriendo.
-De verdad gracias- dijo Zayn.
-No hay de qué.
Subimos a las enormes camionetas negras que llevaban y entre a una sólo con Zayn.