Noah se quedó helado, sudaba frio. Mojaría sus pantalones, estaba frente a su suegro.
—Buenas tardes, Señor James. —Respondió Luna, quitando desconfiada su mano de entre los labios y la mano del Señor James. —Mi nombre es Luna, Luna Bennett.
—Yo soy Eliott Brown, es un placer Sr. James.
Toda la atención se había clavado en Noah, pues parecía estúpido mirando al padre de Yadira, como un ladrón al ver un policía frente a él.
— ¿No te vas a presentar muchacho? — Dudo el Sr. James.
—Ah, por supuesto. —Carraspeo la garganta. —Me llamo Noah, Noah O'Brien. Soy el nov...—Dudo nervioso, tragando saliva. —También soy amigo de su hija.
—Amigo...claro ¿No dijiste que era tu novio, Hija? —Dijo el Sr. James a Yadira.
—Noah que estás diciendo... —Miro Yadira con un poco de enfado a Noah. —Sí, es mi novio padre.
—Quise decir...Si, bueno...Creí que usted aun no sabía señor. — Respondió Noah, todo nervioso apunto de orinar sus pantalones.
—Entonces ibas a ocultármelo muchacho. —Le dijo a Noah, con voz mordiente e intimidante.
Noah se puso aún más nervioso, Luna al darse cuenta que nuestro amigo iba a morir, interrumpió.
—Sr. James vinimos a su casa solo para pedirle que dejara venir este viernes con nosotros a su hija. — dijo segura y convencedora. —Solo iremos a cenar y a jugar bolos, ya sabe cosas de chicos.
—Está bien, señorita. — Acepto el Sr. James. —Le pediré que me cuide muy bien a mi hija señorita Luna. Sé que lo hará ¿Verdad? —Le dijo a Luna mirándola de una manera retadora. Bastante extraña.
—Por supuesto, Señor. —Replico Luna, con cierto enfado en sus ojos.
—Bien, espero verlos pronto muchachos. — Se despidió dándonos la espalda y subiendo las finas maderas de sus escaleras cubiertas de alfombrado vino.
Salimos de la casa y nos subimos al auto. Noah se quedó conversando con Yadira afuera. Mientras Luna pensativa y nerviosa se acomodaba en el asiento, recargando su cuerpo en mi hombro.
—Eliott, sentí algo extraño en ese señor. —Me dijo preocupada.
—Así es la gente rica. —Respondí. —No hay de qué preocuparnos.
—Recuerdas lo que te dije hace unas horas, mientras veníamos en camino.
—Sobre los cazadores. Luna no creo que el señor James sea un Cazador, si lo fuera no hubieras salido viva de su casa. Amenos que no se diera cuenta que eres una Lobo. —Abrace a Luna intentando tranquilizar sus sospechas, para que no se preocupara demasiado. — Nunca dejare que alguien te toque Luna.
— ¡ESTAS BROMEANDO!— Grito Luna con una carcajada, golpeando mi estómago con su hombro. —Que podría hacer por mí, Eliott el humano débil. Terminaría salvándote el trasero Yo a ti. —Me aseguro burlándose.
Tenía razón. Si ella se encontrara en peligro, yo no podría hacer absolutamente nada para salvarla. Pero si Luna e convirtiera en hombre Lobo. Tal vez podría ser diferente.
—Qué tal si...
—No, nunca vuelvas a pensar eso Eliott. —Me interrumpió Luna, apretando mi mano muy fuerte. —Además, yo no tengo el poder de convertirte en hombre lobo. Solo un alfa puede hacerlo.
—Bien, buscare a tu tío, —Le dije bromeando.
—Saldrás corriendo como la última vez que lo viste. —Se burló.
Obviamente me causo gracia recordar como mis piernas me temblaban aquel día que me encontré con el tío de Luna. Nos reímos bastante. Entre las risas y bromas, Luna acaricio mi cabello, recorriendo hacia mi cara con su mano.
—Eliott, ¿Alguna vez te he contado sobre el amor en los Lobos?
—Creo que no. ¿Qué es lo que tengo que saber? —Tome su cadera, elevándola hacia mí, poniéndola sobre mis piernas, dejándome así ver su rostro frente a frente conmigo.
—Solo que... Cuando un Lobo sale con alguien que no es de la manada, como un humano la conexión entre ambas personas es más fuerte. El lobo se encariña eternamente. Se le dice imprimar o impronta. Se describe con una fuerza más fuerte que el amor a primera vista. Al tener la impronta en alguien la única razón de vivir para el lobo será que la otra persona sea feliz.
— ¿Soy ese humano, Luna? ¿Sucedió la impronta conmigo?
—Creo que...—Callo al ser interrumpida por Noah.
—Bien chicos, vámonos. —Dijo subiéndose al auto. —Yadira me perdono por quedar como Idiota frente a su padre. —Agrego Noah, feliz.
Nos esperaba un largo viaje de regreso a casa, al poco rato de camino los tres comenzamos a sentir demasiado sueño. Era extraño, los tres nos sentimos cansados, en unos segundos estábamos débiles Noah conducía con mucho esfuerzo, parecía que algo nos estaba debilitando. Noah cerro los ojos, y perdió la conciencia, alarmado y volteando a ver a luna me di cuenta que ya se había dormido también. Por el parabrisas resaltaban unas luces cegadoras, tanto que fue inevitable cerrar mis ojos. Solo escuche el ruido de un carro frenando velozmente frente a nosotros. Y en segundos, perdí la conciencia.
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La Loba #LupiSacri2018
WerewolfMuchas desapariciones y cuerpos sin vida están llamando la atención del pueblo... ¿Que está pasando en North Dakota? Las cosas en el pueblo están tornándose extrañas, mientras tanto Eliott Conoce a una nueva chica que ingreso a la preparatoria y en...