La Loba #LupiSacri2018

Conexion

                                                                            

"Ahora que sabia el secreto de Luna, mi corazón no me permitiría separarme de ella."

Ya pasaron varias semanas desde ese día en las canchas de la escuela, y Noah, Luna y Yo, nos hemos vuelto grandes amigos. Luna se ha vuelto muy importante para mí. Siento que tengo que estar a su lado para siempre. Me he enamorado de ella inmensamente y tengo miedo de que ya lo sepa. Pues Luna nos platicó muchas cosas sobre los Hombres Lobo. Como que cuando alguien está mintiendo su corazón acelera el ritmo cardíaco y un hombre lobo puede escucharlo y descubrir la mentira. Un hombre Lobo puede escuchar a su presa en movimiento a kilómetros, así como también puede sentir como el aire choca con las alas de un ave. Y ella escuchaba hasta los susurros de las personas de la biblioteca de la escuela.

Lo único que me tranquilizo fue que no menciono nada sobre leer mentes, así que no podría escuchar cuando le digo lo hermosa que se ve todas las mañanas al entrar por las puertas que abren Asia los pasillos de la escuela.

Hoy íbamos a terminar un proyecto final para la clase del profesor Will, planeábamos ir a mi casa pero mi madre cogió una rara obsesión por las plantas, colecciona demasiadas y se ha encargado de adornar toda la casa con ellas. Tiene en el jardín, en el patio trasero y masetas dentro y fuera de cada ventana en casa. Cualquier persona esperaría que tuviera Rosas, tulipanes, tal vez algunas margaritas pero mama siempre me sorprende llegando cada mes con una maceta nueva de Wolfsbane.

Por lo que Luna no puede ni pasar por la calle enfrente a mi casa sin sentir debilidad. El Wolfsbane en una planta con poderes sobrenaturales que reacciona en contra de los hombres lobo. Haciéndolos sentir debilidad, mareos y en casos extremos la muerte.

Entonces acordamos ir a casa de Noah y allí trabajar cómodamente.

—Le dijiste a Luna que nos veríamos en tu casa a las 3:30pm. —Miraba con desesperación a Noah.

—Claro que sí, le envié un mensaje al salir de clases. No pude decírselo yo mismo, porque hoy salió de la clase con bastante prisa.

—No sé, es extraño que viviendo a un lado no haya llegado a la hora acordada. Ella siempre es puntual. —Noah me ignoraba y no mostraba importancia a la impuntualidad de luna, pues desde que llegue el ah estado ocupado en el teléfono compartiendo mensajes con una chica que había conocido en una de esas cenas de colegas de trabajo a las que sus padres asistían cada tres meses.

—Creo que le llamare a luna. Necesito asegurarme de que este bien. —Apenas terminaba mi frase cuando mire de reojo que en la puerta de la habitación ya estaba Luna observándome.

—Todo está bien, Eliott. —Me decía mientras me tiraba una gran sonrisa, y me miraba con esos ojos dorados, que me dan tranquilidad. —Pero me pregunto ¿Por qué tanta preocupación? Olvidas que soy una mujer lobo. Sé cómo cuidarme.

—No es preocupación. —Mentí. —Solo que ya has llegado una hora tarde y necesitamos trabajar mucho en lo de Will.

Noah salto un brinco desde la silla donde estaba y dio un grito de Felicidad. Y de inmediato abandono la Habitación dejándonos solos. Pero regreso.

—Yadira me ha dicho que está muy cercas de aquí. Quiere que nos veamos ya. Y lo siento amigos pero tendrán que ayudarme dejándome ir y hacer mí parte del trabajo para después.

—Claro de si, Noah. Vete ya. — Respondió Luna pasándole su chaqueta y llaves de su casa. —Diviértete Loquillo que nosotros nos encargamos.

—Noah ¿qué estás diciendo? Yo no hare tu trabajo viejo. ¿Acaso soy el único que se preocupa por esto?

—Vamos Eliott déjalo ir ya. Nosotros podremos hacerlo bien. —Luna me convencía y termine cediendo a sus encantos.

—Está bien Noah. Diviértete amigo. — La verdad estaba nervioso por quedarme solo con Luna. Y al parecer creo que sintió como se aceleró mi ritmo cardiaco.

—Enserio son los mejores. El amo— Se despidió dándonos algunas cosas que necesitaríamos y salió corriendo de la casa. —Pórtense bien chico. Mis padres llegaran tarde. — Nos gritó desde abajo, haciéndonos sentir incomodos.

Luna me observaba y me daba cuenta que escuchaba mis latidos muy rápido. Trate de controlarme. Pero hoy era la primera vez que me quedaba asolas con ella y la verdad estaba echo un manojo de Nervios.

—Porque sube tu ritmo, Eliott. ¿Estás bien?

— ¿Que? Claro que si Luna, solo estoy nervioso por Noah. Es tarde y ya sabes, hay muchos peligros haya afuera. Además de hombres lobo. —Le mentí pero creo que ya sabía que ella era la razón de que mi corazón estuviera a punto de tener un paro cardiaco.

—Creo que hay algo más que te pone así. — Me dijo mientras se sentaba en la cama muy cercas de mí. — Me he dado cuenta que cada que me acerco a ti pones los ojos en otro lugar menos en mí, además que tus latidos son más rápidos.

Tenía que decir algo rápido, se dará cuenta que me enamore de ella desde la primera vez que la vi. Que cosas digo, ya se dio cuenta. Ahora es cuando las Habilidades de los hombres lobo, me empiezan a molestar.

—Tal vez si te tengo un poco de miedo, ya sabes por ser lobo. A quien no asustarías. — Espero que se trague mi mentira.

—Claro que no me tienes miedo. Lo supe desde el día que les revele mi secreto a Noah y a ti.

No podía creerlo, Luna ya sabía que yo estaba enamorado de ella. De inmediato Luna se puso enfrente de mí y se sentó en mis pernas rodeando mi cuello con sus brazos. Nuestras caras estaban demasiado cercas, mi respiración aceleraba a cada segundo al sentirla demasiado cerca de mi miembro. Se mojaba los labios con su lengua y al mismo tiempo sus ojos brillaban como los de los lobos en el bosque a plena obscuridad.

--Hay algo que he querido hacer desde hace mucho tiempo Eliott. Pero no me atrevía por los nervios que me entraban. Pues nunca lo eh echo. — Cerró sus ojos.

Y me beso. Fue el primero beso que ella había dado en toda su vida. Lo sentí, fue sincero...fue profundo y puro. La tome por la cintura y la apreté con fuerza hacia mí.

¡Vaya!... Mi corazón estallo.