WOOPS!!! (Versión Resumida)

C U A T R O

El sistema de K007 era muy complejo, y el hecho de que ella se estaba resistiendo ante la manipulación de su software lo hacía el doble de difícil. La máquina que Edward controlaba estaba como en una especie de carrera contra el sistema de K007, para ver que ganaba.

—¿Que está pasando?— se preguntó el pelinegro al ver que su dispositivo empezó a vibrar entre sus manos y miles de mensajes de advertencia aparecían en la pantalla, bloqueando el proceso de hackeo. Después de una revisión a los archivos de su aparato se dio cuenta de algo terrible : El virus que Jackie había instalado en K007 en caso de que algo así llegara a pasar estaba empezando a dañar los archivos y carpetas. Edward trató desesperadamente evacuar la operación, pero más mensajes de alerta seguían bloqueando la pantalla. De repente, la voz fría de K007 habló :

"Se ha detectado un intruso. El sistema se encuentra en serio peligro. Eliminando objetivo"

Entonces la robot alzó una de sus cuatro manos e intentó aplastar a Edward, pero este al darse cuenta de que iba a ser atacado hizo un movimiento ágil para caer de pie y a salvo. El pelinegro ahora debía pensar en una nueva estrategia, y cuando miró hacia la pared detrás de él se le ocurrió una idea.

—¡Chicos, Edward está en peligro!— gritó Lluvia preocupada. Iba a echarle una mano.

—¡Yo voy!— interrumpió Almíbar, corriendo hacia Edward, evitando los brazos de K007 que la perseguían. Aquellos brazos iban tan rápido con una flecha y cuando fallaban chocaban muy fuertemente contra los muros. Un par de golpes más y seguramente la pared se derrumbaría. Ese era el plan de Edward : derrumbar el edificio entero.

—¡Almíbar!— gritó Edward todavía esquivando—, ¡Debes evadir todos los brazos, así el edificio caerá!

Ella asintió y para provocar a la chica computadora le lanzó un pequeño ataque, el cual le llegó justo al pecho. El robot se retorció e intentó atacar a la chica con sus cuatro brazos, pero Almíbar se salvó de milagro gracias a Edward.

"Oh no" dijo K007 al notar el gran error que había cometido. A causa de sus cuatro fuertes manos, la pared en la cual se estaba recargando toda su fuerza comenzaba a derrumbarse.

—¡¿Que hiciste K007?!— gritó Jackie al escuchar el estruendo causado por la pared chocando contra el piso. Todos se dieron cuenta de lo que iba a pasar y James gritó, alertando a todos :

—¡¡Cuidado!! ¡¡El edificio se derrumbará!!

Todos se apartartaron de allí, y como si James hubiera predicho el futuro, el techo empezó a caerse en pedazos mientras el piso temblaba. Los compañeros de James salieron de allí como pudieron, pero el líder estaba aplastado por una pared que había caído sobre sus piernas de resortes, y no podía zafarse de allí.
James miró a ambos lados, y pudo ver como Jackie estaba agachada en el piso cubriendo su rubia cabeza con sus manos y tosiendo terriblemente por el polvo lleno de partículas de cemento y pintura. Ella gritaba y gritaba, pero su voz sonaba ahogada. Jackie miró hacia James y después hacia arriba. Para su desgracia pudo definir la silueta de un gran pedazo de cemento arrancado que estaba a trasluz gracias al sol y que iba a aplastarla. La chica reaccionó tarde y el gran pedazo de cemento cayó sobre ella, y si no hubiera tenido una ventana, probablemente no estaría viva.

Nada se salvó, y los únicos que estaba allí casi intactos eran Nimechi y Carol, los cuales estaban en el piso abrazados y cubiertos en una capa de polvo, K007, Jackie y James. Este ultimo mencionado fue el único que se pudo parar al instante, pues levantó el muro con sus fuertes manos y lo hizo a un lado para poder liberar sus piernas. Ya de pie, James pudo observar que Jackie seguía bien, solo que estaba desmayada. El peliceleste se iba a ir, pero algo lo detuvo. Algo en su interior le pedía a gritos salvar a Jackie de los escombros que casi caían sobre ella. James desistió por unos segundos, pero después los sentimientos le ganaron a la razón. James caminó hacia Jackie y, muy despacio, la levantó y la mantuvo acostada en el suelo a su lado. Aunque su cara pálida estuviera manchada y aunque su mente estuviera corrompida con pensamientos malos, seguía siendo bonita y tierna. James entonces recordó como antes Jackie buscaba tiernamente su cara y le plantaba un beso. James se sonrojó ante ese hermoso pensamiento y de repente unas ganas incontrolables de besarla invadieron su mente.

"No debo hacerlo" decía frunciendo el ceño, "Ella es...ella es..."

Entonces una luz se encendió dentro de él. Quizá podría darle un pequeño beso e irse rápidamente. Y así lo hizo. Levantó la cara pálida de Jackie y sin pensarlo más, la besó.  Aquellos labios todavía se sentían suaves y dulces, como hace muchos años y los cinco segundos que duró esa experiencia fué hermosa, placentera.

"Ahora debo irme" pensó James, dejando en paz a Jackie sobre el piso. Aunque no quería, debía hacerlo, así que miró hacia otro lado y salió corriendo como bala.

Justo en ese momento Jackie despertó y cuando abrió sus ojos sintió un extraño calor en sus labios. Ella simplemente ignoró ese sentimiento y se levantó del suelo para buscar sus sirvientes, afortunadamente encontró a Nimechi y Carol ilesos, pero K007 estaba con su pantalla rota y con una quemadura en su pecho.

—Vaya...que mal. No tenemos donde dormir ahora— suspiró con tristeza Carol mirando el lugar donde antes estaba la habitación de él y Nimechi. El pelirrojo soló miró hacia abajo con decepción y Jackie reclamó :

—Esos idiotas...

Ellos se quedaron pensativos un rato, y después de todo ese rato, Carol rompió el silencio diciendo totalmente confuso :

—¿Que haremos ahora?

—Tengo un "plan"— respondió Jackie—.Iremos a la cuidad en busca de algún hotel o que se yo, pero iremos donde no halla mucha gente.

Los dos sirvientes se miraron entre sí preocupados, pero después asintieron, pues este no era muy buen momento para discutir o criticar a su jefa. Así, con Jackie al frente y con Carol llevando a Nimechi atado a su correa como un perro, partieron los tres hacia la cuidad.

Este trío de compañeros andaban sigilosamente a través de los callejones y por calles sin salida para buscar de un buen lugar para dormir, pero la mayoría de lugares que estaban bien para pasar algunos días estaban ocupados por vagabundos que cuando veían a Jackie se "emocionaban", la llenaban de piropos sucios o simplemente los menos malhablados se apartaban asustados, sabiendo el peligro que aquella chica era.

Finalmente, cuando la noche se hizo presente, ellos caminaban por las calles vacías en busca de algún pequeño lugar. Cuando ellos iban a rendirse y regresar a los escombros del edificio encontraron un lugar libre en la entrada de un casino llamado "Good Lucky" que estaba abierto. Al lado de una ventana de ese local había un pared que si bien no era tan cómoda serviría para dormir. Ellos celebraron en silencio, se acomodaron allí tanto como pudieron y durmieron.

Ya eran las cinco de la mañana cuando un auto se estacionó en frente del casino y de allí salió una familia. Ellos vieron que Jackie y sus sirvientes estaban durmiendo y, discretamente, llamaron a la policía. Un hombre vió desde adentro del casino aquella escena y después de que la familia se fuera, el hombre salió junto con dos ayudantes y entre todos cargaron a Jackie y los demás para refugiarlos dentro del local.