[ Wodahs & Kcalb ] Ｈｅｒｍａｎｏｓ ｄｅ ｓａｎｇｒｅ [ D R A B B L E S ; The Gray Garden ]

Drabble №3

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  Se sentó a orillas de la cama, con un silencio absoluto, dándole la espalda a su hermano menor.

  Siendo que él siempre debía demostrar rudeza ante sus siervos, ser frío e implacable, una presencia fácil de admirar: En estas circunstancias era en las que frecuentaba fallar con más facilidad. El diablo deseaba ser más afectivo con aquel ángel caído que aterosaba como hermano, o incluso de su estirpe.

«Nadie nace sabiendo, lo sé. Pero... es muy difícil aprender de la nada.»

  No había tenido padres que le guiaran… o no sabía si considerar exactamente a esa persona como tal. Si hubiera sido criado de una forma más “normal”, podría guiarse de una base al menos, pero su situación era distinta.

«Familia.»

 Lo más cercano que tuvo a eso fue su creadora, con la cual había iniciado un eterno conflicto de ideales contrastantes, una guerra que se predecía como interminable. Tener a un ciervo de su creadora era fácilmente reconocible como traición para sus leales demonios.

  Por ello es que mantenía oculto al pequeño Wodahs.

  ¿Qué pensarían los súbditos del diablo al enterarse que este cuidaba a un bastardo de Etihw?

 El mayor se dispone a sacudir al niño que yace cubierto por las cálidas sábanas de la inmensa cama, para así tratar de entablar un amistoso diálogo con su hermano.

  —Sé que estás despierto, Wod.

  —Sí quí istís dispiirti, Wid —así fue como el pequeño querubín comenzó a imitar de mala gana todo lo que dictaba el albino.

  —¡No me imites!

  —¡Ñi mi imitis!

  —¡Uhhh, ya verás!

  Kcalb, sin esperar respuesta por parte de su contrario, se abalanza sobre el otro para propinarle un inesperado ataque de cosquillas justo en la barriga. El bulto que se trataba de esconder bajo su refugio de sábanas ahora se sentía obligado a salir para tomar aire, pues las risotadas le impedían esto.

  —¡Haha!... N-no… hehe… e-en la pancita no… —balbuceaba entre risas el pequeño ángel, mientras se retorcía y trataba de alejar a su hermano.

  Sabía, el atacante sabía que si asaltaba esa zona tan delicada del menor repercutiría más en su cometido.

  —¿Y bien? —le encantaba hacer que el niño dijera sus palabras de arrepentimiento, le daba cierta satisfacción.

  —L-lo siento, n-no lo volveré a hacer. Lo juro.

  «Si claro.» pensó entre risas internas el diablo oscuro.

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N/A: Buenas~

  Este drabble salió más cortito de lo que esperaba, y es que necesitaba traerles algo, sobre todo a una personita.

  Esta parte la hice especialmente para MinakoAino810, quien aprecio mucho, siempre me anima con sus comentarios cuando me tiro mierda a mi misma x'D además de que tenemos una obsesión casi similar con una ship y un cierto ángel jefe~

¡Feliz cumpleaños atrasado, preciosa!