-Con curiosos… ¿a qué se refiere?-me interesaba ese tema por lo que decidí averiguar todo lo que me fuese posible.-
-Quiero decir que, esos seres no son normales. Creo que no existe ningún animal de dicha especie la cual todavía no sabemos cuál es.-miro a la Sra. Roberts antes de poner una mueca de preocupación en su cara.-Todos debéis regresar a vuestras habitaciones y encerraros allí hasta que consigamos dar con las personas u objetos que proyectan esas sombras y… respecto a los “bichos” ya decidiremos qué hacer, ahora volveréis con vuestra cuidadora, os alojaréis y os entretendréis como queráis.
Y así lo hicimos, nos levantamos de nuestros asientos y cogiendo nuestras mochilas fuimos saliendo de la clase en fila de dos. Al pasar por el pasillo, la sangre había desaparecido, yo suponía que la habían limpiado y así todo parecía estar como siempre, pero solo lo parecía. Iba al lado de Sam como de costumbre, la gente nueva la mayoría de veces pensaban que éramos hermanas. Teníamos el mismo pelo largo, liso y claro, los ojos de un color azul verdoso y alrededor de la pupila amarillento, la misma estatura no llegábamos al metro setenta y lo único que nos diferenciaba era que a mí me encantaba leer mientras que a ella solo le interesaba la informática. Delante nuestra iban las personas más odiadas de toda la “prisión”, las hermanas Dawson, eran bordes, creídas y pijas y lo peor es que las dos eran iguales, siempre vestían igual y todo lo hacían a la vez e igual. Las odiábamos como todo el orfanato y para colmo nuestra habitación la compartíamos con ellas. Os imagináis estar escuchando todos los días del año:
-¡Me he roto una uña!, ¡Se me ha manchado mi antifaz con esmalte! ¡¿Qué voy a hacer?! , ¡Mi precioso pelo se ha contaminado con vuestros virus! ¡Exijo que me cambien de habitación ya!
No las aguanto son insoportables pero lo peor todavía no ha llegado…
-
Llegamos a nuestro cuarto, abrimos y pasamos. Me senté sobre mi cama. Nuestro cuarto era como un pequeño desván, tenía dos literas de hierro con sábanas blancas y mantas negras, un ventanal triangular que estaba tapado para no poder ver a través de él y que solo y únicamente entrara un poco de luz. Sam subió a la de arriba y Marylin, una de las hermanas Dawson se sentó en la de abajo junto con su hermana Sindey a hablar de manicuras. Yo en cambió decidí mirarme el libro de naturales para ver que entraba en este curso, pero fue un error. El capítulo 5 trataba de las energías. Una de ellas era la nuclear, claro eso ya lo sabía yo, de lo que no me había enterado era de que hace poco, unos 3 meses, había sucedido una explosión nuclear en una de las centrales. Ponía que hubo muchos heridos y solo 2 muertos. Todo sucedió cuando leí los nombres de los fallecidos que aparecían en negrita. Charles Mcgrow y Ahsley Linson, dos personas que llevaban los mismos apellidos que yo.
-
Mientras tanto, en la habitación de los chicos...
Narra Richard:
Entramos y empezamos a hablar de todo lo que había dicho la directora.
-Yo creo que todo son imaginaciones suyas y Alisson... bueno yo creo que todos sabemos que su infancia no fue buena aunque no sepamos lo que ocurrió en realidad-dijo James en tono líder.-
-Déjala en paz, creo que ella es lo suficientemente adulta como para saber lo que dice y lo que vio. Yo la creo, es de fiar.-le respondí en tono enfadado, odiaba que dijeran cosas así sobre ella.-
-Richard, todos sabemos que esa chica no es normal, nunca lo ha sido.-Kurt respaldó a James intentando que todos tuviesen la misma idea sobre ella.-
-¿No me habéis oído? Que paréis de hablar de ella, hablemos de otro tema.-dije intentando no enfadarme aún más.- ¿Qué creéis que están haciendo ahora mismo?
-Ni idea, pero me apuesto lo que queráis a que las Dawson están hablando de pijotadas.- Marcus soltó una carcajada.-
Todos nos acercamos al hueco que habíamos hecho en la pared para espiarlas. Allí, veíamos de espaldas a Marylin y a Sindey, ¡cómo no, hablando de uñas!
-¡Já! os lo dije.-susurró Marcus satisfecho.-
-¿Y las otras dos que hacen?-James intentó ponerse delante para tener mejor vista.- Alisson está con el libro de naturales y Sam... ¡¿está cantando?!
Kurt sacó la lengua con asco, yo me aparté del agujero, odiaba espiarlas. La idea de hacer aquel boquete fue de James que era el "rey" de esta habitación. Todos y cada uno de nosotros debíamos hacerle caso, ya que él tenía información sobre nosotros que nadie tenía que saber.
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16 Sombras de Media Noche.
HorrorAlisson Mcgrow, una chica de 15 años que lleva desde pequeña en un orfanato. Nunca había ocurrido nada extraño pero este año, en el que celebraria su décimo sexto cumpleaños, empezaran a ocurrir cosas realmente extrañas que nadie hubiese imaginado.