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Carlos:
Antes de salir cojo los cascos, pero no para ponermelos ahora sino, para poder escuchar música en el recreo en la biblioteca.

Pasan cinco minutos hasta que la veo en la parada. En cuanto la miro retira su mirada y hace como si estuviese mirando hacia el otro lado. Decido hacer como si no me doy cuenta.

-Hola - digo cuando ya estoy lo suficientemente cerca cómo para que me escuche.

-Hola - responde ella sin disimular su enorme sonrisa que le sale al hablarme.

-¿Que tal?-digo para iniciar una conversación.

-Bien, no se a ti pero a mi ayer me callo una buena...-dice de nuevo con una sonrisa deslumbrante.

-Yo... la verdad es que no les dije nada, les llegó la notificación a mis padres de que no había ido a primera pero les dije que había perdido el bus, cosa que, en cierto sentido es verdad. Lo siento si te molesta.

-¿Por que debería de molestarme?

-Yo..ehh...pues...no se...-La verdad es que no se por que lo dije... por suerte llega el bus. ¡salvado por el bus!

Ana:
Me alegro de que no viniese con los cascos puestos. Se cree que no me he dado cuenta de que uno de ellos sobre sale de su abrigo, por lo que no se los ha olvidado.

Subo detrás de él al bus y nos sentamos dejando el pasillo de por medio.

-Oye, se me ha ocurrido una idea - digo - Si quieres, podemos jugar a esto: yo intento adivinar algo de ti y, si no acierto me corrijes.

-Vale - dice el - empieza.

-Mm...tienes un hermano, pequeño.

-No - me corrige el sonriendo - mi único hermano es mayor y se fue hace mucho de casa.

-Este juego no se me da bien - digo con una sonrisa- te toca.

-Te encanta leer y el negro

-Lo de leer era obvio, casi siempre leo en el bus.-digo riéndome. - Y en cuanto a lo del negro no es que me guste el color pero me encanta la ropa negra, combina con todo. - Aclaro.

Veinticinco minutos mas tarde llegamos a su parada. Ahora se mucho más de el. Su color favorito es el azul, sus padres están divorciados, nunca se lleva muy bien con su único hermano mayor, toca la guitarra y le encanta el deporte.

Entro en clase e inmediatamente le cuento todo lo que paso ayer con Oscar a Elroe. Se queda alucinada.

-Dios, me va a matar a preguntas.

-Pues vas a tener que decirle que no lo conoces, aunque sería raro que tu no lo conocieses siendo mi novio.

-Eso se puede arreglar... - No se es lo que está pensando pero fijo que es una locura - Mañana como es viernes me voy en bus. Me puedo ir contigo y conocerle y después sólo tendría que volver aquí para coger el bus que me lleva a casa.

-No, ni loca vas ha hacer eso. Casi no lo conozco y no es mi novio. Solo me hizo un favor delante de Oscar finjiendo que lo era.

-Ana, ambas sabemos que cuando algo se me pasa por la cabeza es imposible quitármelo de encima... - Dice Elroe.

-Vale, igualmente lo ibas hacer. - digo - Pero no hagas el ridículo ehh.

-Vaale, actuaré normal. - Justo entonces entra el profesor en clase. Se me pasan muy rápido las tres primeras horas y por fin salgo al recreo.

Me dirijo a la cafetería junto con Elroe y voy a pedir cuando noto que alguien me toca el hombro. Es Oscar.

-Ana, ¿Podemos hablar un momento a solas?

El chico del busDonde viven las historias. Descúbrelo ahora