Después de sus largos entrenamientos en la escuela Namjoon siempre va al pasillo n°3 para intentar hablar con su Seokjin, han pasado ya mas de 4 años haciendo lo mismo y no le habla, tan solo lo observa irse.
Sus manos temblando, su respiración era agitada, su piel se erizaba por cada paso que daba, <<"¡ESTOY AVANZANDO JODER!">> gritaba en su mente, sus pies le pesaban pero sin importarlo seguía avanzando. A su frente estaba Jin leyendo un libro de cocina, con sus hermosos ojos llenos de cafeína pegados en el libro, se mordía el labio dejándolo con un tono mas carmesí del normal, Jin tenia ese habito y lo hacia muy seguido lo que le provoca una dulce sonrisa a Nam.
Nam había pensado mucho en hablarle de una vez a Jin antes de que fuera tarde la otra noche, tenia que dejar el miedo y lanzarse y tomar lo que quería, igual que lo hacia siempre en el baloncesto, y nada en este preciso momento se lo...
— ¡NAMJOONIE! - gritaba un chico con piel morena y una sonrisa cuadrada en su cara, corría como si alguien lo persiguiera pero no era así, el chico se detuvo ahitado postrando su mano en el hombro del mayor — el... el... entrenador - parecía como si se fuese a ahogar pero a los segundos retomo su hermosa sonrisa de alien — el entrenador te ha llamado, dice que es urgente asi que es mejor que vayas corriendo.
— ¿Crees que que se dio cuenta que dañe el casillero otra vez? - dijo con una cara de preocupación. Hace unos dias Nam había perdido sus llaves del casillero y tuvo que golpearla para poder abrirla, con esta es la 17va vez que la daña y no paga por ello.
El chico al frente suyo al recordar lo que había inicia a reír contagiando a Jin, su risa era algo rara pero para Nam era hermosa, todo lo que fuera de Jin para Nam era perfecto .
— Si yo no lo recordaba tal vez el no se haya dado cuenta de que la dañaste otra vez, tal vez sea algo diferente, su cara era algo como... - dice el chico mientras trataba de imitar la cara del señor, era bastante chistosa pero con lo que recapitulaba, el entrenador estaba serio.
— Ok, gracias - se despidió del chico y corrió hacia la oficina, tal vez la próxima hablaría con el chico, tal vez.
°°°
— ¿Me ha llamado entrenador? - pregunta el chico mientras entra a la oficina, era un poco desorganizada y sin color pero no olía feo como los vestidores que quedaban afuera de ella.
— Si, necesito hablar contigo... - el chico asiente y se sienta frente a el señor que a puesto sus codos en el escritorio, al parecer esto seria largo — como veras hijo, este es tu ultimo año y ya tienes que saber que vas a hacer con tu vida y aprovechar las oportunidades que te esta dando el cielo... - saca una hoja de su carpeta y se la entrega al chico — es una solicitud para la universidad de Nacional de Seul, ellos te han dado una beca para que estudies lo que quieras con la condición de que te quedes en su equipo de baloncesto, míralo así como una beca deportiva, no tienes que escoger una carrera muy dura pues lo importante allí sera el deporte.
El hombre se levanto de su silla para sentarse enfrente de y hablarle de lo importante que era su futuro y lo talentoso que era para ello, pero Nam no estaba de acuerdo con ello, el no quería vivir del baloncesto, el quería hacer otras cosas, el deporte tan solo era un hobbie en el que destacaba mucho pero no se miraba en su futuro viviendo de ello.
— Hijo, eres muy bueno en el baloncesto, puedes hacer grandes cosas con ello, pero tu felicidad es primero, piensa en lo que te haga feliz y dedícate a ello.
"Kim Seok Jin"
SOY DE CAPÍTULOS CORTOS, NO ME CULPEN.
Cuídense pocas.
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