Como todas las noches Jimin visitaba a Yoongi, se besaban, se acariciaban y luego se daban las buenas noches pero aquel día fue diferente, Jimin notó que el mayor yo llevaba ropa interior y aprovechó la oportunidad para demostrar que no solo usaba la boca para cantar como los ángeles sino que también hacia unos orales de infarto. Yoongi agradeció que Jin no hubiera lavado ese día.