Quédate conmigo

II

Viktor no sabia que hacer en ese momento. A tan solo unos pasos estaba el culpable de sus sueños y pesadillas.

Su lindo cerdito había crecido y se transformó en todo un hombre. Fue sorprendente, no solo el hecho de verlo; que protegiera de esa forma tan firme a Toshi a pesar de escuchar la orden de un alfa. Sabía que no se encontraba bien, fue una situación basta fuerte. Quería preguntarle eso y mucho más, pero primero lo más importante:

-Yuuri... ¿Qué haces aquí?-.

Yuuri se encontró con esa hermosa mirada, pero no tenia la luz que lo atraía. No sabía que palabras para explicar su motivo por estar en ese lugar... y terminó diciendo la verdad.

-Vine a verte a ti- bajo la mirada y mordió su labio un poco antes de hablar-más bien es algo que necesito de ti. ¿Podemos hablar en otro lado más privado? -.

-...Si, podemos ir a la sala de descanso de la sala de pediatra, sígueme-Viktor sonó serio. Este último esperaba que quisiera hablar de lo que pasó años atrás en Japón.

Yuuri lo siguió hasta una sala con escritorios,armarios y sillones.

-Con permiso...- el japones no podía olvidar sus modales antes de entrar a un nuevo lugar y sentarse.

-Bien, entonces, ¿Qué haces acá después de todos estos años? ¿Y buscas algo de mi?-Lo último lo dijo de una forma mas chistosa que cohibió un poco al asiático.

-Hace poco... me diagnosticaron quistes ovárico y tienen que hacerme una histerectomia. Si quiero tener un hijo ahora es el momento-sabía que a esta altura Viktor ya entendió para que estaba ahí y espero para escuchar su reacción.

Pero se había olvidado que cuando las cosas son sobre él, Viktor puede llegar a ser un poco distraído.

-Entonces, ¿Necesitas que te haga contactos para una inseminación?-.

Yuuri se sonrojo al darse cuenta que tendría que ir al grano y ser claro para no dar mas vueltas al asunto.

-Viktor, quiero que seas el padre de mi cachorro-este quedo quiero como piedra ante la mirada fija del omega- no puedo hacerme una inseminación porque son muy costosas, y creí que la manera tradicional serviría...-.

El alfa se quedo en shock mirando la nada, sin entender en su totalidad lo que le estaba pidiendo. ¿Un hijo? ¿A él? ¿Por qué no se lo pedía a cualquiera de Hasetsu? Estaba seguro de que ese intento de beta-nugget con ketchup estaría encantado... De solo pensarlo sintió un asco muy profundo.

-¿Por qué yo?¿Qué tengo de especial que me elegiste Yuuri?-.

-La verdad es que no lo se... Cuando pensaba en quienes podrían ser todos tenían algún defecto, en cambio vos no, surgiste como la opción ideal- Yuuri mentía, muy en el fondo sabia que él siempre fue la única opción para ser el padre de sus cachorros- no te pido que tengas luego de esto alguna obligación ni nada. Supongo que ya tienes una vida hecha y quizás hasta pareja...- eso último lo dijo con un dolor visible, pero el ruso estaba muy ocupado pensando en que decir.

Esta le parecía una oportunidad única en la vida. El dueño de sus sueños le pedía un hijo. El omega por el cual su alfa lloraba le estaba diciendo que él era el único con el cual podría engendrar cachorros. Su lado alfa estaba que estaba que estallaba, se sentía el macho mas fuerte y dominante que a pesar de todos esos años no pudo ser superado por esos intentos de pretendientes que tuviera su cerdito.

Quiso seguir preguntando cosas pero se dio cuenta que el aspecto de Yuuri no había mejorado su aspecto y que su aroma a omega era mayor.

-Yuuri, ¿Acaso estas entrando en celo?- un sonrojo de su parte fue la respuesta que necesitaba- M*erda... Vámonos, este lugar no es seguro-si su celo seguía aumentando seria muy peligroso, no quería hacerlo en medio de una sala en la que cualquiera podría entrar.

Espero a que él se parara para darle su chaqueta, estaba seguro que vio la del japones en el otro omega cachorro, lo mas probable que fuera para ocultar el aroma del celo. Si salia afuera no tendría frió y también su olor de alfa ayudaría a tapar el olor de omega en celo.

-¿A donde vamos Viktor?-.

Viktor se acercó un poco para aspirar el aroma de Yuuri antes de hablar.

-Tu celo esta por presentarse y no seria buena idea que ocurra aquí- Yuuri no entendía a que se refería- lo que quiero decir es que si vamos a engendrar a un cachorro en medio de tu celo, preferiría que sea en un lugar que sea mas seguro y que nos haga sentir mas cómodos que una sala de descanso-.

-¿Entonces aceptas?-Yuuri lo miró ilusionado y sonrojado.

-Si... ahora vámonos antes de que haga alguna locura-.

El alfa sabia que sus instinto animales estaban saliendo a flote. Quería preñar a su omega en su territorio, en un lugar que sea suyo y que nadie moleste. Quería hacerlo suyo las veces necesarias hasta que ya no piense en seguir viviendo sin su esencia de alfa. Quería marcarlo para que sea obvio a los ojos de los demás que le pertenecía y así evitar que lo saquen de su lado.

Yuuri seguía a Viktor quien lo había agarrado de la muñeca y lo guiaba a lo que creía que sería la salida del hospital. Aun no sentía por completo los síntomas de su celo, pero sabía que cuando llegara seria demasiado fuerte; porque llevaba años suprimiéndolo, ya no tenía el supresor y también... lo pasaría con el único que querría hacerlo.

Con Viktor Nikiforov.

Con el hombre de su vida.

Con el alfa que su omega reconoció.

Con su Viktor.

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Hi!

La verdad es que no esperaba que terminara en esta parte, pero se alargó mas de lo planeado (casi mil palabras) XD por lo que esa parte que tu ya sabes e.e pasara en otro capítulo.

Este capítulo tampoco esta corregido así que al igual que el primero puede que tenga todo tipo de errores, pero la idea principal esta presente, y eso es lo que importa.

The force may be with you.