-Creo que es todo por hoy Andrew-
-Creó que si, gracias ayudarme con esto-
-No es nada hombre, además para eso estamos los amigos o ¿no?-
James y yo estamos juntos desde primer grado en el instituto, nos graduamos en la misma universidad, trabajamos en la misma compañía, cosas de la vida dirían muchos, pero creo que es como el hermano que nunca tuve.
-Que dices si vamos a tomar unas cerveza para finalizar el día de trabajo-
-No puedo Andrew, los niños y Jessica están esperándome para la cena, eso de ser padre y esposo es algo raro pero divertido espero que te toque algo así pronto-
-Pronto tal vez, pero si-
-Buenas noches viejo, no llegues tarde, mañana conoceremos a la nueva directora de tecnología-
-Cierto, nuestra nueva jefa-
-Hasta mañana!-
Caminamos en direcciones contrarias y a la vez estaba pensando en eso de tener una familia, a eso de los 27 años vivo sólo, mis padres viven en otro país y prácticamente estoy solo en esta gran ciudad, pero las penas es para después, ire a in bar a tomar unas cervezas y ver las peleas de la noche, siempre han de haber algo bueno.
Llego a mi bar preferido, "Los tres demonios" comida buena, buen ambiente y sobre todo buenas chicas para ligar, pero sexo sera para después aunque si no me importa puedo ver si consigo venirme en algunos senos hoy.
-Charlie dame lo de siempre-
-Vale Andrew, ya te lo pongo-
Me fui a sentar, y de la nada, una silueta frente a mi me quito la mirada, de la barra, una chica totalmente nueva por estos sitios, de estatura promedio, un poco llenita, de cabello castaño, grandes senos, gran trasero, y a simple vista, y de ojos claros, como la miel, era simplemente alucinante.
Me dirijo hacia ella, para por lo menos saber quien es ella.
Dicen que en este sitio hacen los mejores mojito de la ciudad-
-No soy de mojito, soy de algo mas fuerte, con sabor y que den ganas de repetir-
-Creo que puedo ayudarte con eso, mucho gusto Andrew Hills
-Bethania Collems, pero me puedes llamas Beth-
-Bueno Beth espero que tu pareja no se moleste por estar hablando conmigo-
-No lo creo, siempre y cuando no te use como mi consolador personal no creo que se moleste
-Bueno, creo que unos cuentos gemidos he de sacarte
-Tranquilo vaquero que para la otra vida me veras desnuda en esta solo podrás ver mis senos y mis labios.
-Bueno seria grato ver mas allá-
Su mirada me penetraba, los camareros nos trajeron cada una de las órdenes y mientras tomábamos unos tragos, ella se comienza a ver un poco agitada, aunque quisiera tirarmela no sería buena idea metérselo estando ella borracha, pero quiero saber mas de ella, ese cuerpo tiene que tener secretos.
-Estas bien, si quieres puedo llevarte a casa, y así podemos seguir despues-
-No quisiera molestar, puedo pedir un taxi-
-Nada de taxi, te puedo llevar si gustas y así se que estaras bien
-No quiero ser molestia-
-No es molestia, así estaré seguro de que seguras viva
-Vale, vámonos
Pague las cuentas y fuimos a mi auto, cuando en su espaldaun tatuaje de una forma de isla o algo asi, pero su vestido Estaña sumamente corto, y ella caminaba literalmente despacio, para que yo le fijase en ella de arriba hasta abajo, llegamos a mi auto y todo el trayecto, nos pasamos hablando de nuestros gustos, que hacemos, carrera, y todo eso.
Llegamos a su casa, algo sencilla, en los suburbios, cuando ella me dice que pase para tomarnos un café y así no estar tan sola, acepto su invitación y de cierta manera estudio su forma de ser, cuando entro a la sala y cierto la puerta, ella solo se me pone en frente y me dice:
-Espero que como te veas, lo tengas,.
Me besa y me muerde, entra su mano en mi pantalón y aprieta mi pene con malísia, como si jamas ha hecho algo, yo la cargo y la tiro en la pared, le quito el vestido, y a sus bra los levantó para ver sus senos blancos, grande y formados, se desespera y me baja el pantalón, para entrar mi pene en su boca, comienza a recorrer cada parte del con su lengua y sin aguantarlo mas la tomo por el cuello, y le aprieto, con tal fuerza la dejo libre y le rompo su braga, sin pensarlo solo la bese y la. Penetre, deseando que me quede dentro, solo comencé a penetrarla con fuerza, hasta llegar a mi limite, ella quiere seguir pero quiero correrme, pero ella esta excitada, pero jamas había sentido algo tan vivo, tan grato, simolente era como volver a ser virgen, ella comienza a gemir ya decir mi nombre, hasta que de sus labios salen, me quiero venir...
Me acerque a su oído izquierdo y le susurre
-Te puedes venir encima de mi, solo quiero que me dejes todos tus fluidos, encima-
-Quiero que te vengas en mi senos, pero quiero que se quede tu pene dentro de mi-
-Correte Bethania, que yo soy tu juegue esta noche-
La tome por la cintura y con movimientos mas rápidos y fuertes comencé a ver como se ponía su rostro rojo de las ganas acumulada, cuando solo dejo un ultimo grito
-SOY VIRGEN, SOY VIRGEN, SOY TUYA, SOY TUYA!
Y ahí mismo se corrió, aprovechando esa situación solo saque mi pene, y encima de su cuerpo inmovil, me masturbe y me viene encima de ella.
