¡A liarnos se ha dicho!

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A mis 21 años, me golpeó fuertemente el amor. Sí, así de trágico suena, porque asi de trágico se ve.
Él, cabe recalcar, fué mi compañero de clases en los dos últimos años en una escuela en la que yo era la nueva y en donde no hubo ningún acercamiento entre él y yo.
En esa etapa en la que las hormonas aún no hacían su parte en mi pero si en la mayoría de mis compañeros de clases, él se encontraba fielmente enamorada de una Monserrat, una de mis compañeras, y bueno, no negaré que detras de mí habían dos pre-adolescentes jugando a ser "machos" pero repito... las hormonas aun no me tocaban...

Los primeros tres años del colegio nos separamos para luego encontrarlos a la mayoría de ese grupo escolar en 1ero Bachillerato en el mismo colegio en el que yo estudiaba desde que la escuela acabó.

Debo decir que esos fueron los tres años más conflictivos y estresantes de mi vida. Siempre fui la típica niña a la que sus padres cuidaban demasiado la privaban de muchas cosas, era algo asi como: Tengo que hacer un trabajo en grupo -(Que vengan a hacerlo ellos acá, tu tienes casa). Con eso ya se imaginarán.  En fin... mi padre sobre todo siempre me chantajeó en el sentido de.. "¡Si yo me enteró que andas por ahí, hecha la enamorada, te saco del colegio y tu verás lo que haces!" Asi que, siendo sincera y ahora que lo pienso bien, arriesgue mi futuro muchas veces si llegaban a descubrirme.

No negaré que estuve en plan vacile con algunos chicos del colegio, pero juro que todos fueron a parte de Bachillerato (supongo que en ese tiempo mis hormonas despertaron).
El primero Carlos, un pendejo de ojos marrones claros, tes blanca y debo admitir que bastante guapo, con cara de pendejo pero sin ser nada pendejo, me montó los cuernos con una chica de otra especialidad. Pero la culpa fué mía por hacerle caso a mi amiga pues... Marge quedo prendada de Carlos desde que lo vió en nuestro salón el primer día de clases. Me pidió que me acercara a él para ganarme su amistad ya que yo era "sociable" y asi poder hacer que yo la recomiende como novia; y todo iba bien hasta que Carlos me pidió a mí ser su novia y no a Marge. ¿Que si casi que me infarto? ¡ Pues claro que si! Pero eso me pasa por ir a darmelas de Cupido. Asi que Marge me pidió de favor que le diga que sí por ella y pues.... el resultó no ser lo que se esperaba que fuera. Un día en recreo me llegó una carta diciendo : "Carlos es mío, déjalo ser feliz conmigo de una buena vez y alejate". Le enseñé, por supuesto, la dichosa carta a Carlos y quedamos encontrarnos en clase de Ed. Fisica para hablarlo. Bajaba por las escaleras cuando escuché mi nombre, volteé y era él.
-¿Conoces a la chica que envió la carta?- le pregunté un poco molesta.
-Sí, es solo una amiga- respondió despreocupadamente.
-Y entonces ¿la carta?¿me explicas? ¿tienes algun tipo de filtreo con ella? Porque si es así tendras que elegir tu -solté bastante molesta por su quemeimportismo inoportuno.
-Pues en ese caso, elijo quedarme solo - dijo suspirando con resignación y alivio.
En pocos palabras, él fue quien dejó todo, a pocas semanas, Diana (la chica de la carta) y él salian en plan Novios. Aún asi, luego de la ruptura, cuentan mis amigas, que se lo veía llorar en los pasillos, escaleras y jardineras del colegio por mi culpa; porque no queria volver con él.
Un poco antes de que la relación con Carlos terminara un chico ya me coqueteaba, creo que por eso no me dolió tanto la terminación. Gregor cursaba un año mas, el último año. Estaba en el grupo musical al que yo pertenecía, era nuevo, tocaba la zampoña y quena (instrumentos andinos ecuatorianos) de tes morena apaisanado, poco agraciado pero con una labia propia de cualquier mujeriego; y no me equivoqué al final en ese punto.
Fue él quien me robó mi primer beso en una de las presentaciones del grupo musical, y la labia funciona, créanme. Me hizo creer, a mis 15 años que realmente se habia enamorado de mi y yo le creí, incluso llegué a creer que yo me habia enamorado de él ¡¿Pueden creerlo?! ¡¿YO?! Me tardó unos meses descubrir o mas bien, enterarme de que también me montó el cuerno con su mejor amiga.
Consejo del día: NUNCA pero NUNCA confíen en la mejor amiga de su novio, eso es cacho seguro. ¡Que se lo digo yo!

Ya en mi último año en el colegio decidí no liarme con chicos puesto que ya había tenido dos decepciones anteriores. Pero,no les pasa que se plantean hacer algo que a la final no termina por cumplir? Es como cuando llega el primer dia de año nuevo y se dicen "hoy empiezo con la dieta" y así hasta que llega el siguiente año. Pues así, justo así, me pasó; y no porque no quisiera, todo se lo debo a mi prima y a una apuesta.
Un día mi prima y yo estábamos sebtadas en las escaleras del ultimo piso de uno de los pabellones del colegio.
-¿Arlet?- dijo un poco nerviosa
-¿si?- respondí analizandola
-¿Qué si te digo que le gustas a un compañero de mi clase? Preguntó.
-Eh... ¿lo conozco?
-Nop
-Pues que se joda, eso no es mi culpa. Ni lo conozco.
-Que mala y simple que te han vuelto las decepciones-me dijo burlona.
La miré seriamente y luego me reí. Le dije que no queria enacames ni cupidos en mi vida, que estaba bien asi.
A la semana siguiente el chico en cuestión ya se había acercado a mi. Jhoseph era un chico tranquilo, simpático, un buen muchacho. Se hizo mi amigo y no paraba de molestar con que le gustaba, yo le decía que me daba igual. Hasta que una mañana mi prima me hizo un tipo de apuesta que ahora no recuerdo, pero consistía en besar a Jhoseph y pues ¿que creen?.. Sí, fui y lo besé, rl.me devolvió el beso, luego se arrodilló y me pidió que fuese su novia y pues me dio tanta ternura que acepté.  El final con él llego el ultimo día de clases, yo partía a la Universidad y él se quedaba aun en el colegio, asi que esa fue la despedida. De todos, debo admitir que él fue la excepción, aunque no fue de él de quien me enamoraron luego...

ÉL, y Sólo Él. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora