-Vegeta ¿Puedes venir un rato?- le dijo Bulma a su "esposo", ya que en realidad, estos nunca se habían casado, apenas si habían tenido un hijo, casi gritándole- Necesito que pruebes algo por mi.
-No me interesa lo que quieras mostrarme.- dijo el saiyajin de clase alta, cruzándose de brazos mientras fruncía el ceño y levantaba la voz- Así que dejame en paz de una vez.
Vegeta había estado deprimido estos últimos dos años desde la muerte de su rival en manos de Cell.
Al principio creyó que tan solo era el sentimiento de haber perdido a otro saiyajin y ser, probablemente, el último de su especie, ya que le había pasado lo mismo cuando se enteró que el planeta Vegeta había sido destruido por Freezer, o incluso cuando Nappa y Raditz murieron.
Pero al pasar los meses, no podía sacarse a Kakarotto de su cabeza, pensaba en el al despertar, cada vez que comía, ya sea desayuno, almuerzo, cena u otro tipo de meriendas, pensaba en lo mucho que su rival adoraba comer, en como tragaba la comida como si de una muy potente aspiradora se tratara.
Al intentar entrenar recordaba lo mucho que le gustaba hacerse más fuerte, que por una simple pelea podía perder todo su sentido de la responsabilidad, transformándolo de un padre de familia el cual es, podríamos decir, "ejemplar", a un simple niño ansioso por sentir la adrenalina correr por sus venas mientras golpea de una manera tan disciplinada que sería tan impropio de él.
Y al dormir, pensaba en que seria de él en el otro mundo, y al soñar, solo podía hacerlo con el clase baja, nadie más que Son Goku y él mismo se proyectaban, ya sea luchando, conquistando algún planeta o haciendo algo mucho más personal, desde compartir un beso hasta sus aposentos.
Al escuchar que la esposa de su rival deseaba tener al clase baja de una manera u otra, escuchó que Bulma le propuso crear eso que llaman una "Inteligencia Artificial" la cual imite a la perfección al saiyajin menor, aunque claro, solo podría ser un simple programa de computadora ya es demasiado complicado llegar a unir una IA con un robot en tan solo 2 días, así que esta tendría que acostumbrarse a una simple imagen de su esposo hablándole como si fuera él mismo.
-Vamos Vegeta, deja de ser tan amargado y ven por un momento.- Bulma volvió a llamar al Principe, esta vez levantando tanto la voz que alarmó a media ciudad.-Creo que esto te va a gustar.- Y al escuchar esto, el saiyajin de clase alta se giró y comenzó a caminar hacia donde se encontraba su mujer y dijo.-Espero que sea algo útil y no uno de tus experimentos raros que siempre quieres hacer conmigo.- Ya se lo imaginaba, iba a usarlo como conejillo de indias para quien sabe que disparate se le ocurra, tan solo esperaba que no fuera atentar con su orgullo más de lo que ya lo había hecho en el pasado.
-¿Qué quieres?- Dijo Vegeta, esperando lo peor.- Más vale que no sea otro de tus raros experimentos.
-Nada de eso.-Bulma soltó una risilla casi inaudible.
-¿Entonces?- Vegeta ya estaba lo suficientemente desesperado como para salir rápidamente de ahí para continuar en su rutina de "Mortificarse pensando todo el día en Kakarotto".- Dime ya ¿Quieres?
-No le hables así a la primera mujer en lograr perfeccionar el arte de las IAs.- Bufó orgullosamente y añadió.- Ya que por fin, después de dos días de arduo trabajo, logré crear a Son Goku, bueno, en este caso, solo recreé su personalidad y años de recuerdos en esta pequeña memoria.- Alzó un microchip tan pequeño que si lo dejas caer, se ha perdido para siempre.
-¿Y eso a mi me incumbe en qué modo?-
Dijo Vegeta, pensando en seguir su anterior plan lo más rápido posible antes de que fuera a afectarle mas de lo debido, suficiente había tenido con todo esto, tan solo deseaba descansar un poco.
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Computer Boy
FanfictionGracias a la inteligentísima Bulma y la ausencia de Son Goku, a petición de ChiChi, la científica creó una inteligencia artificial extremadamente idéntica a Goku. Pero quien decide apropiarse de esta misma es nadie mas que Vegeta, es cual es solici...