MEDIODÍA

27 1 1
                                    

Ahí estaba yo, sentado frente al viejo pero robusto árbol de olivo.
La verdad no sabía lo que estaba haciendo ahí exactamente.

Tomé el oso de peluche.
Lo miraba con disgusto y nostalgia.
Decidí dejarlo bajo el árbol y marcharme mientras fingía que no me importaba lo que pasaría con él.

No pude dejarlo solo.

Me senté frente al oso y lo miré fijamente. Era medio día.

Esa frase invadió mi mente otra vez.
"Mientras más alto estás, más duro caerás"... "... más duro caerás".

Tomé el oso y lo coloqué en mi regazo.

El sol fue cubierto por las nubes.

Era como si el día me quisiera ver llorar.

Y lo logró.

Una lagrima traicionera se resbaló por mi mejilla izquierda, cayendo directamente sobre el oso de peluche.

Algo se rompió... algo pasó...

TU y YO... otra vez!Where stories live. Discover now