Abrí los ojos de golpe sin tener la más mínima idea de lo que estaba pasando.
Más que el sueño en general esa voz me tenía en completo shock.
No sé si era la misma persona que vi corriendo hacia mi ya que me susurró por la espalda, su voz era tan apacible, sentí su respiración en mi cuello y su aliento cerca de mi oído.
"¿Qué se supone que significa esto?", pensé. No sabía qué hacer al respecto.
¿Podría ser este el mismo chico de mi sueño anterior?, podría... pero ¿Qué significa?, ¿Qué tiene que ver él en todo esto?
Estas preguntas recorrían mi mente una y otra vez, y este sentimiento de temor y paz a la vez no me dejaba reaccionar bien. Me levante para ir a la escuela, tome un baño rápido, me cambien y baje a preparar un desayuno de lo más básico para llevar conmigo.
Tome mis cosas y me dirigí a la escuela, pensando aún en este sueño,hasta que un pensamiento llegó a mi mente "Tengo que hacer algo".
Si quería resolver esto tenía que actuar, necesitaba encontrar la parada en donde aquel niño moriría para ver lo que sucedía o intentar rescatarlo.Pensé en lo que vi al rededor de esa parada, era fácil por que no había tantos edificios parecidos, y si, resultó que esa parada estaba a unas cuantas cuadras de la escuela, pero ¿por qué no estaba esa persona y el niño allí?.
Recordé la hora de la muerte, "8:34 am", eran las 7:30, por lo que faltaban 64 minutos, bien, puedo esperar.Cerca de esa parada había una cafetería, decidí entrar ahí para esperar y ver qué llegarán, supongo que no faltará mucho, así que pedí un café y espere sentada frente a la ventana, decidí leer mientras esperaba y es lo que hice.
Pasó un buen rato y aproximada mente a las 8:00 am pasó por la ventana de la cafetería la persona con la que hablaba la mamá del niño y 10 minutos después llegaron aquella madre y su hijo.
Desde la ventana podía ver todo así que observé unos minutos.
Aquella señora llegó y se paró junto a su hijo, se tomaban de las manos, hasta que vio a la persona que conocía y se saludaron, por ende le soltó la mano a su hijo y ahí me di cuenta que era momento de salir.Guarde mis cosas lo más rápido que pude y me levante de ahí, salí hacia la parada del buz y comencé a pensar en lo que podría hacer para que no fuera raro acercarme al niño.
Camine para quedarme cerca de él y saqué dos panes que había comprado en la cafetería, el niño estaba pegado a su madre y yo no quería llamar la atención, así que espere.Espere a que el niño volteara a ver al perro, pero aquel perro aún no aparecía y yo me ponía cada vez más y más nerviosa; una sensación de desesperación invadía mi cuerpo y se hacía cada vez más fuerte.
El pequeño niño se apartó un poco de tu mamá y pude ver la agujeta de sus zapatos, este era el momento que esperaba.
—Hey, pequeño— susurre para ver si escuchaba y trate de decirlo lo más tierno que pude.
El niño volteo un poco asombrado a verme.
Le hice una seña para que se acercara a mí y le mostré el pan que tenía conmigo, está a solo dos o tres pasos, pero aún así dudaba; me acerque a él y me hinqué, le di un pan y lo siguiente que hice fue atarle las agujetas.Me sentí un poco tranquila, sin embargo sabía que si veía al perro podría cruzar sin querer, con atarle la agujeta no lo salvaba.
Regrese a sentarme y tratar de encontrar a aquel perro del otro lado de la calle y me lleve la sorpresa más grande de ese día.Lo vi
Me paré de golpe sin dejar de observar, aquel chico de mis sueños estaba parado del otro lado de la calle, el miro hacia un lado y me percaté que veía llegar al perro del sueño, "¿Qué está pasando?" Pensé.
El chico se agacho, saco de su mochila una correa y se la coloco al perro, después saco una gorra y un cubre bocas, acto siguiente se colocó el cubre bocas y antes de ponerse la gorra miro hacia donde yo estaba.
Cruzamos las miradas.
Me vio con cierta suspicacia, fueron a lo mucho dos segundos, pero fueron los dos segundos más intensos de mi vida, no sabía qué hacer más que verlo sorprendida, él estaba serio y su mirada no decía nada.
Termino de colocarse la gorra, se levanto y se fue de ahí con el perro.
Aquel niño jamás lo vio, llegó su buz y se fue junto con su madre.
Yo seguía en shock, no dejaba de pensar en la mirada de aquel chico, no sé quién era, no creo que él sepa quien soy yo, jamás nos habíamos visto y lo único en lo que pude pensar es:"El también sabía del sueño".
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•Despierta•
Science FictionTodo comenzó cuando yo tenía 8 años, nadie me creía más que mi padre y aún así no pude salvarlo. Siempre que duermo tengo sueños que al despertar se vuelven realidad, no se por qué pasa, pero casi siempre sueño con el momento de su muerte. Si se vue...