STIGMA (VKook/KookV)

XIII

Jungkook y Taehyung se encontraban en la habitación de éste último. El mayor estaba tumbado mirando el móvil tranquilamente mientras con la mano restante acariciaba el pelo del maknae, quien se encontraba tumbado descansando su cabeza en el pecho de Taehyung mientras revisaba el móvil también.

— TaeTae...- el maknae dejó su móvil para poder hablar con su hyung-

— ¿Qué pasa, Kookie?- Taehyung también dejó el móvil a un lado y siguió acariciando el pelo del otro-

— Me da pereza ir al fanmeet. Quiero ir, pero me da pereza- habló Jungkook arrastrando las palabras mientras observaba a su hyung-.

— Esto te pasa por irte a dormir muy tarde. Te dije que dejaras el Overwatch- rió Taehyung, ganándose una mueca por parte del contrario-.

Habían pasado unas cuantas semanas desde que comenzaron a salir oficialmente. Aunque, obviamente, sólo sus hyungs lo sabían. Después de todo aquel tiempo libre al terminar de preparar el comeback tenían que volver a trabajar. Y esa misma tarde debían asistir a un fanmeet. Los chicos se encontraban emocionados, igual que con cualquier otra actividad que involucrara conocer a sus fans, pero Jungkook se había pasado demasiadas horas sin dormir por culpa de su videojuego favorito.

— TaeTae, se supone que tú deberías apoyarme no reprocharmelo- protestó el menor. El nombrado rió y comenzó a acariciar el cabello castaño de Jungkook-.

— Perdón, perdón. Pero sabes que es verdad- el maknae alzó la mirada y observó a Taehyung. Su cabello ahora estaba teñido de rubio y la primera vez que lo vio Jungkook juraba que iba a desmayarse por lo bien que se veía así su novio-.

Jungkook se estiró y se posicionó encima de Taehyung, quien lo miraba con amor. El ahora castaño se estiró un poco y besó los labios del rubio suavemente. Taehyung sonrió y acarició el cuello del menor. Un aire carameloso se respiraba en el ambiente, pero la tranquilidad fue rota por unos golpes escuchados en la puerta.

— ¡Salid a desayunar ya, tenemos el fanmeet en un par de horas! ¡Como lleguemos tarde por vuestra culpa los managers nos matan!- los gritos de Yoongi se escucharon desde el otro lado de la puerta. Ambos chicos se miraron divertidos-

— ¡Ya vamos, hyung, no te estreses!- respondió Taehyung mientras reía-

— ¿Por qué siempre es Yoongi hyung el que nos interrumpe?- susurró Jungkook, haciendo reír al otro otra vez-

— Ni idea, pero ya me estoy empezando a acostumbrar a estos gritos. Creo que es la única vez que nos ha gritado desde que nos conocemos- el menor sonrió y apoyó la cabeza sobre el pecho del otro-. Venga, Kookie, tenemos que irnos si no queremos que nos saquen de aquí a rastras- insistió el rubio mientras acariciaba el cuello del otro-.

— No hemos salido de aquí y ya estoy cansado, no lo entiendo- se quejó Jungkook mientras se levantaba de encima del mayor, quien se levantó detrás de él-.

— No te preocupes, cuando terminemos tendremos el resto del tiempo para acostarnos en la cama y hacer el vago- habló Taehyung mientras abrazaba la cintura del menor y comenzaba a caminar. Su animo estaba por las nubes desde que empezaron a salir; el de ambos en verdad-.

Los chicos hicieron su camino hacia la cocina, donde todos estaban desayunando algo apurados. Jungkook y Taehyung se sentaron en la mesa, donde había suficiente comida para empezar el día, y comenzaron a desayunar. El ambiente alborotado hizo a Taehyung sonreír. Tal vez su trabajo resultaba normalmente estresante, pero igualmente era lo que le apasionaba y también le unía a sus amigos. Pensar que volvían a tener un fanmeet después de unos largos meses le hacía sentirse extremadamente emocionado y Jungkook notó la felicidad que irradiaba su novio por los poros, consiguiendo que él se sintiera igual.