Sueño lúcido

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Al irme a casa después de esta tragedia empecé a hacer chequeos de realidad y pensando en los "demonios y espiritus" ¿Qué haré cuando pueda controlar el sueño? No podría reaccionar de ninguna forma, sería muy raro todo, a saber que pasa... 12:01 de la noche, me voy a dormir, tengo más de cinco alarmas a la una de la mañana, a la una y media, etc, tendré una hora para hacer lo que pueda hacer en el sueño, si es que lo tengo, la alarma es sólo por si acaso estoy un apuro que me puedan salvar despertandome. Pasan unos minutos hasta que me duermo y estoy dentro del sueño, me veo a mi mismo pero de repente soy yo, me veo las manos y mi cerebro hace un chequeo de realidad y me doy cuenta que estoy en un sueño gracias a que veo que no tengo gatos en mi casa. Veo que se materializa algo en frente mía, algo blanco, me alejo, pero me agarra, era igual como el que recordaba, pero estaba en mi sueño, y pude controlarlo, hice que me soltara y me dijera que hacía aquí, y por qué me estaba fastidiando la vida de esta forma, entendí algo de lo que me dijo, pero no todo. Me dijo algo de que estaba aquí por algo que no entendí, de repente me desperté gracias a la alarma y ya pude dormir bien.

10:05 de la mañana, Domingo. Me desperté como cualquier otro día, revisé todo lo que tenía que revisar, me fui a dar un paseo y todo fue bien, *Ring ring* suena el teléfono, era mi primo. Me dijo que si quería ir a verle para ver su nueva casa y de paso hablar con él, le dije que vale, me parecía bien. Pero había algo que me daba miedo, ir en coche, me imaginaba que se me podría pinchar una ruda, dejar de funcionar el motor, entre más cosas por lo de los "demonios y espiritus", quedarme tirado, morir de un accidente, me esperaba de todo. Embarqué el viaje a las doce de la mañana, las autovías iban llenas, muchos coches, policía pasando, lo de siempre, empezó a llover y me puse música, la radio iba bien hasta el punto en que se empieza a rayar, la intenté apagar, pero no funcionaba. Intenté pararme a un lado de la carretera sin molestar a nadie antes de que me estrellara o algo parecido, apagué por completo el coche y la radio sr apagó, intenté sacar las llaves, pero se atascaron. Las saqué por fin pero se rompieron. No pude conducir más ni siquiera seguir adelante caminando, no podía dejar el coche aquí tirado, en medio de la autovía casi, se preguntarán que que hace un coche ahí, y tampoco podía ir andando porque estaba demasiado lejos y tendría que ir en coche si o sí. Llamé a la grúa para que se lo llevaran y me dejaron en la casa de mi primo. Mi primo vamos a llamarle Diego, (- = Diego. + = Yo) +Hey Diego. -Hey. +Como ves, he venido en grúa, se me ha parado el coche. Le dije, ya que explicarle todo sería algo raro. -Sí, vaya marrón tienes encima. +Da igual, ¿Qué tal todo?.  -Bien, ¿Y tú?. +Bien, después de todo. -Venga, ven, pasa a mi casa. Su casa era bastante parecida a una mansión, o un chalét, pero se notaba que valía mucho dinero, traté de no preguntar cuánto le costó la casa, pero enseguida me dijo que le costó mil ciento diez y siete Euros, lo cual ni yo puedo permitirme. Enseguida tuve miedo de que algo pasara en su casa, de que se rompiera algo por mi culpa o algo. -Te empiezo a notar tenso, ¿Estás bien?. +Sí, sólo estoy pensando en el problema de mi coche. Estoy preocupado. -Tranquilo. Oye y dime, ¿De qué trabajas ahora? +De programador. -Buen trabajo.

(Después de muchas conversaciones)

Pasan tres horas por lo menos y ya era hora de irme yendo para mi casa, eran las siete de la noche, pedí un taxi, pero también con miedo, mientras me iba en taxi, hablaba por teléfono a mi primo, para intentar estar más tranquilo y pensando en otra cosa, también pensaba en que hacer de comer al siguiente día o que hacer de cenar hoy, la verdad que pienso de todo un poco para estar tranquilo. Pero intentó también cerrar los ojos y decirme a mi mismo que todo va a pasar, o que al menos irá mejor que lo que está pasando. Intentaré escribir los sueños que recuerde, pero sólo los mejores, o los más bonitos, también dibujaré para quitarme el estrés, dibujos abstractos como me gustan a mí, o al menos porque se me dan bien dibujados. Y pensando sobre el trabajo, es verdad que todo se terminó, ahora que me acuerdo. No tenía presupuesto suficiente para crear nada más, no siquiera cualquier otro proyecto, debía seguir con lo mío.

Parálisis de sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora