LA CARTA

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Nadando entre periódicos, apareció una carta de extraña procedencia. Lucía ya bastante antigua por como estaba aquel sobre color arena, enpolvado por la experiencia de los años. Tenía un característico aroma a nostalgia, pues el papel despedía un arcaico olor que lo delataba a leguas.

Opté por abrir con rapidez, como si yo hubiese esperado toda una eternidad por ella. Y al momento de romper con la intriga de una carta, me asombré con lo que decía:

-Eres espejo de tu pretérito...

Miré el final de la carta y el autor era yo, pero de hace doscientos años. 

  

CRÓNICAS DE UN BICHO (MICROCUENTOS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora