///Sebastian///
No podía creer lo que estaba pasando... No quería creerlo.
Podía ver y escuchar como todos se reían, como todos se burlaban de lo que estaba ocurriendo....como todos se burlaban de mi.
Ya no tenía ni una sola duda de que ella era la chica con la que me había topado en la calle y ahora la causante de mi humillación. Parecía que estaba orgullosa de lo que acababa de hacer mientras que yo solo estoy allí, existiendo, respirando y ahora deseando no estar haciéndolo.
Sentía como el asqueroso líquido o intento de puré se deslizaba a través de mi Camisa y goteaba hasta llegar a mis zapatos. Mi una reacción fue salir corriendo del lugar no quería escuchar más como se burlaban de mi y no me sorprende. Siempre todo lo echo a perder o algo sale mal, este era mi primer día y ya cosas como estas empezaban a suceder. Creía que al cambiar de escuela y dejar la preparatoria las burlas acabarían... Ya veo que me equivoque. No podía entender porque esa chica hizo lo que hizo, ni siquiera la conocía y tampoco le había echo nada. Pero tampoco es que quiciera pensar en ello.
Seguía corriendo ya me dolia el pecho de tanto correr y me ardía la cara al sentir en contacto del viento extremadamente frío con mis lágrimas. llegué al punto de salir del edificio y dirigirme al central. Para mí suerte no había nadie allí todos estaban en los comedores y creo que nunca había agradecido tanto algo, así que al menos tengo suerte de que fuera así.Recordé algo que había dicho Charlie, ''en esta escuela hay muchas ratoneras''. Las ratoneras eran los pequeños rincones sin Salida que habían en toda la preparatoria, allí según Charlie se escondían a veces algún que otro par de chicos para no ser molestados, Por su puesto que él era el que molestaba y no el molestado... Claro mi hermano era el chico perfecto.
No tarde mucho hasta que vi uno de esos callejones sin salida. Ya no podía más, me dolían las piernas y el pecho me ardía por el llanto, no podía parar de llorar... No Podía más. Llegué hasta el final de la ratonera y me de deslicé contra la pared hasta llegar al suelo. El lugar era bastante estrecho tanto que mis rodillas quedaban encajadas entre mi pecho y brazos.
Todavía no entendía el porqué de esa chica de la cual ni siquiera sabía el nombre me había echo eso. Ya me dolia cabeza de solo hacerme esa pregunta a la cual yo no tenia respuesta. Mi llanto era cada vez más triste, silencioso y entre cortado.
Ya me dolia demasiado el pecho y había perdido la noción del tiempo, no sabía desde hace cuanto he estado en este lugar. Era solo el primer día y me asusta saber de que más Sería capaz de hacer esa chica y aunque no le he echo nada... Creo que entendía por qué lo hizo. Soy un chico inútil a comparación con cual quiere persona y sobre todo con mi hermano y tal vez ella solo quería dejar claro que no deben meterse con ella... O yo solo me había vuelto su pequeño juguete... Su miserable e inútil juguete humano. Un escalofrío recorrió mi cuerpo en tan solo pensar en eso y me ponía aún más nervioso una Sola cosa y era que tal vez si ella llegara a enterarse de mi secreto , podría acabarme con eso tan solo deseándolo. Y Eso no podía ocurrir.
Esta vez estaba seguro de que Ya había pasado bastante tiempo, lo suficiente para saber que me quedé dormido sumergido en Mis pensamientos y miedos en este lugar. Luego de un rato una voz familiar me despertó, pero ahora sonaba más tierna y amable que antes... Ahora era mucho más cálida y calmada. Era Tobias.
-... Hey...Sebas, ¿Estas bien? - Tobias hablaba muy despacio y en un tono muy bajo, aparentemente ya sabía como trata a un chico que había llorado hasta el cansancio.
ESTÁS LEYENDO
S.Lewys #CsEditionsNovela2017 #LDAW2018
Teen Fiction«Escuche durante toda mi vida decir a mis familiares que lo que fácil aparece, igual de fácil se va, y todos tenían razón en ello. Nada es para siempre, incluso las personas, por eso se debe luchar por lo que de verdad se quiere porque el "vivieron...