Murderers Of The Shadows (PAUSADA)

Capítulo 3: What it is?

Narra Freddie

16:09 pm.

Acabo de entrar a la fábrica Frida y definitivamente odio esté lugar, arruina mi outfit.
Como sea así qué déjenme presentarme me llamo Freddie Marano. Tengo 35 años y soy gay.
Si soy gay y lo digo con orgullo, pero mí familia nunca estuvo de acuerdo con mí orientación sexual,por eso ni bien lo descubrí me fui de mí casa, me fui a los 18 ni bien termine la escuela.

Obtuve trabajo en una tienda de ropa, que actualmente es una de las más conocidas de Estados Unidos.
En fin, el sueldo que me proporcionaban me servía para vivir dignamente.

Pero yo necesitaba más, todo para Julio. Ay, Julio, como te amo querido mío.
Empezé a salir con Julio unos días después de dejar mi casa y Julio, el me ayudó a ser libre.
Por eso Julio se merecía el universo, pero no podía dárselo, no con ese sueldo.
No me malinterpreten, el sueldo es bueno, el problema es que en ese entonces no vivía con Julio y todo lo pagaba yo. Mi ropa, la luz, el agua, la comida, las cosas de la casa, etc.

Entonces para poder comprarle un regalo, debía estar meses ahorrando.
Por eso decidí hacer algo de lo qué nunca me voy a sentir arrepentido, comenze a robar.
Al principio empezé con cosas pequeñas, locales y personas, pero luego llegó nuestro aniversario.
Entonces empezé a robar algo más grande, robe un banco.

Sí, robe un banco, lo hice solo una vez.
No fue nada sencillo, me tomo 2 meses planear el ataque .
Pero bueno, lo hice y me siento orgullo de haberlo hecho, Julio y nos fuimos en crucero al caribe, fue muy genial.
De repente sentí un pinchazo en mi cuello, miro a este y pude ver un dardo.

Supuse que era tranquilizante, así que intenté sacarmelo, pero cuándo lo intente, caí directo al suelo y todo se volvio oscuridad, desde ahí no recuerdo nada, shit.

Me levanto con cierta pesadez en mis ojos, intento fregarmelos con la mano pero sería en vano, estaban atadas a la silla a la cual estaba sentado, igual que mis pies.
Visualizo a una persona al lado mío que en su pecho tenía pegado un cartel de un tamaño intermedio y letras negras que decía "BOBBY" supongo que ese debe ser su nombre, observo al chico, era un chico muy alto con rulos negros y ojos verdes esmeralda, muy lindos, era de tez blanca, muy blanca, más blanca que la leche qué toma mi gatita.
Lo veía un tanto perdido, como yo, volteó hacia mi dirección, así que no se me ocurrio nada más que mirar el techo, que idiota soy. Sentí como me miraba confundido y no lo culpo, ¿Qué persona se queda mirando el techo con la cabeza más dura qué mi suegra bailando? Si, yo. Sentí como me miro por última vez y luego volteó hacía atrás.
Por favor Freddie, eres una diva y la puta ama, no te dejes intimidar por este par de mequetrefes y piojos resucitados. Levanté un poco la cabeza y de su lado izquierdo pude ver otra persona.

Esta persona estaba moviéndose demasiado, como si tuviera un ataque de panico, leí su cártel que tenia al igual que Bobby y vi qué decía "Damián".
El chico no aparentaba más de 25 años, era de tez blanca aunque no tan blanca como la de Bobby, su pelo era corto, era de un color negro muy oscuro y sus ojos eran de un color verde oscuro.

Quería seguir viendo a las personas que estaban atrás, pero de repente la puerta se abrió.
Entró una persona, que parecía ser un hombre con un antifaz rojo qué cubría sus ojos y vestía un traje.
Era de una estatura intermedia, pelo hasta los hombros y con suerte vi sus ojos grises. Eran unos ojos grises podría decir que casi blancos, pero aun así, se veían vacíos.

La habitación quedó en silencio, el hombre estaba mirando a nuestro lado y nosotros a el.
No se escuchaba nada más que las respiraciones de todos en la sala y un tik tok que provenía de una pared, se suponía que había un reloj ahi por ese sonido. Lo gracioso es que no habia nada ahí, nada más que una simple pared blanca, solo blanca.

Ese tal Damián se atrevió a hablar- Nose que es este maldito lugar, pero ya me canse de ser paciente- Dijo en un tono furioso y con cara de ningun amigo, si ninguno.- Tráigame de una puta vez a T.- Dijo gritando.
Lo siento, eso no va ser posible- dijo en un tono tranquilo la persona delante de nosotros, mientras se arreglaba la corbata del traje.
-¿Por qué?- dijo entre dientes Damián.
-Porque T. ya esta aqui- dijo sacando una pequeña risa-
Yo soy T.