Mi papá nunca me había contado cómo había conocido a mi madre ni en donde, es más, nunca mencionó que él trabajó en un zoológico. No sabía si creer lo que ella me estaba contando.
- Un día fui con tus abuelos a una conmemoración en ese zoológico, mi papá era el coordinador y fue obligatorio para mí ir así que mientras él mantenía su discurso, vi a tu padre.
Imaginar a mi padre joven y trabajando en un zoológico fue muy desconcertante. Nunca fui de esas niñas que usaban a cada rato la frase ¿por qué? cuando no entendía algunas cuestiones o sucesos que pasaban a mi al rededor o cosas pasadas que nunca entendía , siempre callaba. Supongo que por esa razón mi papá nunca mencionó aquello, viéndolo bien, no era algo interesante que me gustaría saber a esa edad, cuando ya razonaba las cosas y no tenía ni idea de donde estaba mi mamá.
Sin embargo, a mí nunca me importó, tenía esas pesadillas pero nunca quise darle los créditos a mi madre por aquello.
- ¿Y después que pasó? - pregunté.
Tomó el volante y dió una vuelta a la derecha, había terraceria y antes de seguir con su historia, me dijo que ya estabamos llegando. El zoológico no era nada nuevo pero le daban mantenimiento seguido, lo sé porque de pequeña tenía una maestra que siempre nos llevaba allí una vez a la semana y hace poco fui con William.
Estaba a las afueras de Salem, eran casi veinte minutos de terraceria pero Laura no tenía idea o creo que no se acordaba. De todas maneras no dije nada y dejé que pensara que estaba cerca.
- Estaba aburrida - prosiguió- ya sabes, ese tipo de eventos eran cosas de adultos así que me escabullí entre la gente y caminé hacia el área de reptiles, me daba mucha curiosidad ver una anaconda grande que decían que había, recuerdo muy bien que me acerqué a ver unas iguanas antes de ir a donde estaban las serpientes cuando un chico de cabello corto y lentes me dijo que no podía pasar por ahí - sonrió - cuando lo vi casi me desmayo, creí que era el hombre más guapo que nunca antes había visto.
Quería reir pero me lo guardé.
-... Le dije que quería pasar pero él seguía necio que debería regresar a la conmemoración. Me enojé y lo empujé hasta caerse, él me miró atónito sentado en el suelo - sonreí al imaginarme la escena - después me di cuenta lo mal educada y grosera que fui y le di la mano para que pudiera levantarse pero él se paró con furia en sus ojos, me miró, y después me besó.
Puse los ojos como platos aún sonriendo.
- ¿En serio hizo eso?
- Sí - río.
No imaginaba a mi papá haciendo tal cosa, siempre lo veía serio y distante, todo lo contrario a una persona atrevida o rebelde.
Suspiró y voltee hacia ella, en su mirada noté que recordaba con lujo y detalle cada acción.
- De ahí empezó todo, a cada rato pedía permiso a tu abuelo de ir al zoológico con mis amigas sólo para verlo.
Descarté el hecho de admitir que muy por dentro de mí me sentía feliz por saber eso. Cuando iba en la secundaria recuerdo que mis amigas me contaban la manera en que sus padres se conocían y su relación en sí, a mí nunca me afectó pero siempre tenía curiosidad por saberlo. A pesar de eso, no formulé ninguna palabra con mi papá al respecto.
Llegamos después de veinte minutos.
Laura se estacionó debajo de un árbol que daba un poco de sombra mientras que los demás carros aún no llegaban, el lugar estaba vacío, eran las 2:00 de la tarde y se me hacía extraño que no hubiera casi nadie. Sólo habían tres carros contando el de mi madre.
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Metamorfosis
RomanceKaren sufre un accidente en el que sus recuerdos más profundos son borrados. Años después la raptan. Ella tiene que averiguar el quién es y el por qué de su secuestro. Un oscuro pasado que la persigue sin dejar rastro... Historia de Ekhaterina Rios...