Destiempo (VMin)

Capitulo V

Entramos al salón riéndonos, cuando nos dimos cuenta todo el salón nos estaba mirando con desagrado.
—Park Jimin, Min Yoongi, éstas no son horas de llegar y mucho menos haciendo tal escándalo, miren lo que logran —Repasó con la mano derecha a la clase. —Interrumpen mí clase —Dijo el señor Chung Hee, muy serio. —Vayan a sentarse a sus puestos en silencio... Oh, y Park le reportaré esto a sus padres —Se dio la vuelta y siguió con la clase, en su mirada se notó el placer que le haría reportarle a mis padres que había llegado tarde.

Recuerdo...
Mi madre salía de la oficina del director, mientras yo esperaba afuera en la bancas. Ella se acercó a mí botando con mala gana unos papeles sobre mis piernas.
—Jimin ¿qué es esto? —Pasó sus malos por la cabeza, soltando un suspiro de frustración. —Que nos llamen a tu padre y a mí por un mal comportamiento en clases o peleas puedo entenderlo. Pero ¿por llegar tarde a las clases? ¿qué es lo que quieres sacar con esto Jimin? —Dijo con histeria, manoteando en el aire.
Tomé los papeles donde estaban los reportes de mis atrasos. Solté una pequeña carcajada sin darle importancia.
—¿Acaso te parece gracioso eso? —Dijo a aún más molesta, mientras el tono de su voz se hacía más fuerte.
Lo cierto era que en una de las hojas decía que si tenía otras 15 faltas de esas me echarían de la escuela, tal vez eso era lo que me hacía gracia (para ese entonces).

Levanté los hombros en forma de respuesta a la pregunta que había hecho mi madre.
Con una mano me tomó de la barbilla con brusquesa para que la mirara. —No seas irrespetuoso, mírame cuando te hablo Jimin. Tu padre y yo no trabajamos tan duro como para que te rías en nuestras caras con este tipo de cosas —Tomó los papeles y los sacudió en el aire.
Volví a soltar una leve carcajada cuando dijo que me reía de ellos al llegar tarde. —¡Park Jimin, ya basta! —Gritó mientras me pegaba una bofetada.
Sorprendido llevé mi mano derecha mi mejilla por el dolor, lo podía creer, me paré y la miré fijamente a los ojos, estaba sintiendo tanta rabia, impotencia y tristeza que no me salían las palabras.
—De ahora en adelante tus profesores nos reportarán a tu padre y a mí cada vez que llegues tarde —Dijo firme.
Apreté los puños, mientras tensionaba la mandíbula. —Bien —Dije sin más, pasando a su lado sin mirarla.
• • •
¿Cómo había olvidado eso?

—Pss... pss... Jimin, Jimin...
Parpadeé varias veces regresando del recuerdo, cuando me di cuenta que un incomodo ruido en mi oído persistía, griré la cabeza y era Hoseok mi compañero de baile con el que algunas veces salía, era divertido salir con él, pero algunas veces parecía un niño pequeño y eso podía ser muy molesto.
—¿Qué quieres? —Lo miré con molestia.
—Recuerda que esta tarde tenemos practica. —Dijo sonriente.
Asentí y volví la mirada al tablero, me quedé pensando por unos segundos lo de la practica porque no sabía si afectaría en mi misión. Primero debía encontrar al sujeto que me había contratado; más bien buscarlo, porque él estudiaba en mi escuela y, de hecho era cercano a mí.

No estaba seguro de lo que debía hacer, ya que el director técnico me había dicho que intentara seguir con la vida de mi yo de ese tiempo lo más normal que podía, pero sin desviarme de la misión.

Sonó la campana para cambiar de clase y aproveché el revuelto entre los estudiantes para acercarme a Hoseok.
—Hey, Hobi ¿a qué horas era el ensayo?
—Jimin, te lo dejé escrito en un papelito dentro de tu casillero y te mandé un mensaje —Suspiró. —Pero bueno, para que no se te vuelva a olvidar la practica es a las 6:15 de la tarde, no llegues tarde ¿sí?
—Gracias —Tomé mis cosas y las guardé en mi mochila, me di la vuelta y caminé hasta la puerta. —Y descuida no llegaré tarde, lo prometo.

Cuando salí del salón vi a Yoongi observando el horario de clases, como siempre perdido (según recordaba).
—Oye, Yoongi —Dije mientras me acercaba. —Sé que sonará raro, pero... ¿podrías mostrarme mi casillero? —Rasqué mi nuca aparentando normalidad.
Él giró la cabeza para mirarme, levantando una ceja, extrañado. —Jimin, es la tercera vez que actúas perdido en el día —Puso los ojos en blanco y caminó al frente de mí. —Ven, ¿y si quieres te doy la contraseña por si se te olvidó también —Dijo con ironía.
Le sonreí con ternura para que sí me diera la contraseña del candado. En eso bufó y dijo; —Mira en las notas de tu teléfono, ahí tienes todas las contraseñas que usas... Oh y, este es tu casillero. —Señaló el casillero y se marchó.

Saqué el teléfono de mi bolsillo, busqué la contraseña entre mis notas, tantas contraseñas guardadas y canciones que nunca llegué a cantar o tocar (en eso no había cambiado para nada).
Introduje la contraseña en el candado hasta escuchar el sonido que avisa para poder abrí el casillero.

* * *

Me encontraba sentado en las escaleras del edificio donde vivía, él estaba a mi lado sonriente.
Bajé la cabeza para mirar la hora en mi rejo de muñeca (3:47pm. Año 2024.) cuando levanté la cabeza él se había ido, pero había dejado un sobre en el suelo, me sorprendió encontrarlo porque en el poco tiempo que llevábamos saliendo él nunca había dejado un detalle de ese estilo, tomé la nota y la leí.

"Jimin, llevamos un largo tiempo saliendo, se podría decir que un poco más de seis meses. ¿Recuerdas esta semana la última vez que nos vimos que no dejabas de hablar y yo te insistí que debía decirte algo importante?, bueno! Quiero decirte que desde que te cruzaste por mi vida vi en ti algo que no vi en nadie más. Y tú, tú confiaste en mí como nadie lo había hecho antes.
Recuerdo cuando llegaste a mi casa en plena lluvia solo para decirme que sentías discutir conmigo, porque había sido nuestra primera "discusión".
Recuerdo cuando veíamos una película en tu casa y me llegó un mensaje, tú quisiste desbloquear mi teléfono, pero claro, no sabías la contraseña, y no te la dije nunca. Sé que te estarás riendo mientras lo recuerdas, también sé que te estarás preguntando por qué nunca te dije la dije. Pues me daba vergüenza para ese entonces. Pero ahora es diferente, ¿recuerdas aquel día en el museo? Esa fecha se volvió muy importante para mí, porque no sólo fue nuestro primer beso, sino que desde ese día me di cuenta que quería estar contigo, ahora te puedes dar una idea de lo que es la contraseña de mi teléfono, sé que puede ser algo "inútil", pero es algo importante para mí.
Siento que aquí tengo el valor para poder decirte que te quiero y me gustaría estar contigo.
Att: Jungkook."

* * * *