Acá se pierde la aurora,
acá yacen todas aquellas sonrisas que arrebaté.
Me escabullo con la luz
y doy de sacrificio mis lágrimas
para cuando me encuentre triste
tener que recurrir a tus manos
y sostenerme hasta que la distorsión pase.
Te abrazaré tan hostilmente
que en un punto
ya no serás tu
ya no seré yo,
nos consumiremos mutuamente
hasta mezclarnos en el paisaje
y quedar inmóviles.
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Madrugadas de insomnio
PoésieNo soy una historia de mil páginas, solo un par de hojas arrancadas, arrugadas y esparcidas entre habitaciones desordenadas . A veces me gusta sentirme absorta entre la ansiedad , ahí es donde veo con claridad quien realmente puedo llegar a ser...