CAPITULO 8 "El plan del chico nuevo"

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Fort Collins, Colorado – 3 de Septiembre

POV Lance

Entrar por esa puerta fue intenso. Ser el chico nuevo no es fácil para muchas personas. No es mi caso, a mi me agrada la atención, mucho más con gente de esta edad. Aunque mi cabello y mi piel pulida puedan darme la apariencia de un joven de 21 años, por dentro se esconde un "anciano" de 27, y no porque sea fanático de las películas vintage, o de los álbumes de Los Beatles, sino porque esa es mi verdadera edad.

 Luego de que hace unos años haya matado a Samantha, mi ex-novia, portadora al igual que yo, pude alargar mi vida 6 años. Ella ya no necesitaría más de ese tiempo. Desde ese momento deje de envejecer ¿No es genial?

Hoy estoy en la misma situación que hace 6 años atrás, encontrar una victima que me de un poco más de tiempo. La vida es demasiado corta, al menos para mi. Si ustedes pudieran transportarse con un chasquido a cualquier lugar del mundo que imaginaran, estarían de acuerdo en lo que digo, pero no es el caso.

El plan era fácil: luego de contactar con Sam hace unas semanas, y lo convenciera de ayudarme, solo debía esperar que Denis volviera de sus vacaciones. Debía hacerme su amigo con la ayuda de mi cómplice, y cuando al fin presente a su demonio, Amerie, acabar con él (el demonio debía estar presente, o al menos dentro del radio, durante el ritual de traspaso de vigor).

Según mi informante, Denis era una persona muy reservada y cautelosa, por eso antes de que volviera de su viaje, tendría que integrarme a su reducido grupo de amigos. El plan era perfecto, no podría fallar. No debería... ya que mis días estaban contados.

Faaru se quedó en en hotel Vermont. El hotel estaba sobre la avenida principal, así podría salir si se aburre, que lo haría. Normalmente no abandona mi departamento, Netflix era lo que lo mantenía cuerdo, pero ya que acabábamos de llegar, no me dio tiempo de pedirle la contraseña del Wi-Fi. Como el plan era socializar con las personas de aquí, creí más prudente quedarme por los alrededores, no podía darme el lujo de que las cosas no salieran como tenía pensado.

Sam me enseñó fotos del grupo de Denis así que al ingresar al salón di una vista panorámica de todo el lugar, intentando encontrarlos. Al ver a uno de ellos me acerqué.

 ¡Hola! ¿está ocupado el lugar? – me abalancé sobre el asiento sin tener aún una respuesta.

La chica se llamaba Celine, pero le decían "Cece". Era de tes oscura, sus ojos eran grises y tenía piercings  en cada lugar posible de su oreja derecha. También observé un tatuaje que se dejaba ver por la blusa que llevaba. Este descendía por sus vertebras, de lo que suponía eran las fases de la luna. No me meto con los gustos de otras personas en lo que refiere a tatuajes, pero ¿En serio?¿Las originales fases de la luna? Que disgusto...

 Según sabía era la más social de el grupo, así que era bueno que me haya encontrado con ella. 

– Ese lugar está ocupado. –me increpó sin quitar la vista de lo que estaba leyendo.

– A tu izquierda hay otros dos asientos libres, ¿Los necesitas todos? 

– Algo así. –seguía sin mirarme.  

¿Qué pasó con lo de "la más sociable"? No quiero imaginar la sociabilidad del resto del grupo.

– No nos conocemos, soy Ian. – Extendí mi mano para presentarme. Ella al fin me miró.

– Celine.   –aceptó el saludo y formó una sonrisa. Volvió a bajar la mirada. – Ahora si pudieras... – abrió y cerró su puño indicándome que me fuera.

Aliados de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora