Cartas para mi conejito(FNAFHS,Springtrap y tu) ©

"¿Quieres salir conmigo?"

Vio con los ojos borrosos como se alejaba la ambulancia por las solitarias calles.

Ella lo sabia,sabía que él ya no tenía salvación. Aún así los paramédicos le dijieron que harían lo que estuviera a su alcance.

Dolida entró a la casa y cerró la puerta detrás suya. Lentamente se fue deslizando por esta hasta quedar en el frío suelo.

Su apariencia era demacrada; tenía los ojos inchados y rojos de tanto llorar,el pelo todo enredado y parte de su uniforme manchado de sangre.

Miraba atenta el piso,tratando de buscar una razón por la cual su hermano había hecho ese acto.

Su mirada se dirigió lentamente hacia la bolsa de las compras que había tirado al suelo.

Se levantó del suelo y las tomó,una triste sonrisa se formó en sus labios.

"-E-Estoy bien"

Lágrimas volvieron a caer por sus sonrojadas mejillas. ¿Por qué su hermano le había mentido?

Si hubiera sabido que sería la última vez que lo vería con vida,se hubiera quedado en casa,disfrutando cada momento con él.

Se dirigió a la cocina con intranquilidad mientras comenzaba a hipar al recordar el cuerpo de su hermano inerte en el baño.

Luego de guardar las cosas se dirigió al baño viendo todo limpio.

Se había tomado la molestia de limpiar una vez levantaron el cuerpo de su hermano.

Se deshizo de su ropa dejandola amontonada en un rincón para luego adentrarse a la ducha.

Abrió la canilla y se quedó bajo el agua fría pensando en lo ocurrido.

"-No digas nada de lo que suceda aquí..."

Río con dolor mientras comenzaba a lavar su cuerpo.

-Así que,¿no le puedo decir a nadie sobre esto,Nii?

Miró hacia arriba mientras otra lágrima caía por su mejilla.

(...)

Una vez terminó de bañarse salió envuelta en una toalla del baño,tomó la ropa sucia y la dejó en remojo; no quería que la sangre se terminará de secar.

Se dirigió a su habitación y se puso la ropa más sencilla que tenía; una blusa gris ancha y larga hasta las rodillas y un mini short de mezclilla azul.

Se tiró en la cama y se cubrió con las blancas sábanas.

Cerró los ojos e hizo lo posible por dormirse.

(...)

A la mañana siguiente se despertó a las seis de la madrugada.

Se vistió con lentitud -obviamente con otro uniforme- y se adentró al baño para lavar su rostro.

Luego de sacar cualquier imperfección ocasionada por su llanto,se dirigió a la cocina.

Una vez allí,desayuno tostadas con jugo y salió de su casa.

-Hora de ir a clases-pensó.

(...)

Durante las clases trató de ignorar las miradas preocupantes que le mandaba el pelimostaza.

Cuando el timbre sonó dando por finalizadas las clases,la muchacha tomó rápido sus cosas y se retiró.

Pero aunque halla salido rápido el pelimostaza la alcanzó y la detuvo tomandola de la muñeca.