PUBERTAD (JonDami)

Capitulo Uno

"Sueños Húmedos"

—¡PERO PAPÁ! —gritó molesto Jonathan.

Tanto su padre como su madre, lo miraron con los ojos bien abiertos. Era primera vez que Jonathan Kent gritaba a sus padres y Jon pareció darse cuenta, ya que el chico miró directamente al suelo con arrepentimiento.

—Lo siento, no quise gritar. —continuó con voz suave, casi inaudible.

—Jon, sé que quieres pasar tiempo con Damian, lo comprendo y tu madre también, —le hablo su padre, quien por cierto, había escuchado claramente su disculpa.— pero debes entender que aún no tienes edad para estar hasta tan tarde en la ciudad, sé que te agrada, pero espero que lo comprendas.

Tanto como Clark y su esposa vieron como el chico parecía realmente triste. Entonces Lois decidió aflojar un poco.

—Solo por esta vez te dejare llegar hasta las doce, ni un minuto más ni un minuto menos ¿Quedo claro, Jonathan Kent? —dijo su madre con tono severo, ya que ella no había escuchado la disculpa del niño.

Jon abrió los ojos enormemente y pego varios saltos antes de correr hacia su madre y darle un beso en la mejilla, para luego salir por la ventana mientras se despedía —Nos vemos más tarde.

Damian esperaba a Jon en unos de los tejados más altos de Metrópolis (descartando los grandes edificios de la ciudad). Observaba con atención las calles más cercanas, según él, Superboy estaba muy atrasado, aunque solo hayan pasado dos minutos. Pero entonces el sonido del ondeo de la capa roja cerca, lo saco de sus pensamientos, y tan típico de Damian soltó su comentario.

—Se atrasaron en darte el biberón, Baby Jon. —dijo con voz burlesca como saludo.

—Nada de lo que digas me quitara mi buen humor. —respondió Jon sonriendo y aun manteniéndose en el aire.

—¿Sabor a frutilla? —dijo nuevamente Damian, mientras se llevó las manos juntas hacia un lado de la cara y sonreía burlescamente.

—Eres tan agradable —respondió sarcásticamente Jon sentándose a su lado —¿Algún movimiento?

— Tan movido como la bella durmiente —dijo Robin claramente aburrido.

— Es metrópolis, no esperes algo menos —respondió orgulloso Jon.

Damian se quedó en silencio, algo que para Jon no pasó desapercibido. Pero Damian era algo reservado, mejor dicho, totalmente reservado, sabía que si preguntaba la probable respuesta seria...

—No te importa Baby Jon —le dijo Damian una vez que Jon le pregunto qué le pasaba.

— No seas así, somos colegas ¿No? —Trato de convencerlo Jon.

— Exacto, Kent. Colegas no amigos —le respondió Damian.

— ¿Qué pasa si eso afecta a tu rendimiento? —volvió a insistir Jon esta vez más serio y molesto.

— No te metas Bebe llorón —respondió Damian muy enojado. Se levantó y se encamino hacia el medio del tejado.

— No es necesario que me grites —le dijo Jon elevándose en el aire y acercándose nuevamente a Robin.

Los ojos de Damian escondidos detrás de la máscara de Robin miraron directamente los ojos azules de Superboy, mientras este volvía a pararse sobre el tejado evitando que Robin le diera la espalda. Jon se quedó quieto, esperando cualquier movimiento agresivo de parte de Damian, pero este simplemente soltó su muletilla característica.

—TT. No vas a dejarme tranquilo hasta que te cuente ¿No? —le menciono con un tono arisco. Jon simplemente sonrió.— Eres un dolor en el culo.

Damian volvió a sentarse sobre el tejado, esta vez saco su tableta y la dejo al lado por si sucedía cualquier cosa mientras ellos hablaban. Jon lo imito y parecía muy emocionado ya que sus ojos parecían brillar más de lo que ya lo hacían. Por un momento Damian dudo en contarle ya que era algo muy personal y aunque sabía que era totalmente normal a su edad, eso no quitaba que fuera algo vergonzoso de contar.