Pequeños besos para tí. »Satzu«

capítulo tres.

Eran las 3 de la tarde, y Sana estaba con Momo. Se supone que tenían una salida para compensar lo lejanas que se sentían, pero no parecía serlo. No parecían pareja; Sana estaba viendo de lejos como ella hablaba por teléfono.

Se deprimió un poco.

❇

Sana recibió un mensaje de Tzuyu, y sonrió. El mensaje era bastante simple, le mostraba una foto, una de un lindo gatito bebé.
La foto tenía un escrito seguido de ella; un "¡Mira lo que encontré!" Y un emoji de una flor.

Por un momento, Sana se olvidó de la forma en la que se sentía. Alejó, por segundos, la pesada desesperación que tenía gracias a que Momo la ignoraba, olvidó los celos (a los que se negaba llamar celos) que la atormentaban y pensó en lo lindo que sería estar con Tzuyu en ese preciso momento, en lo bien que se la pasaría.

Oh, oh.
Cuando Sana notó que había preferido estar con ella, se asustó.
¿Porqué preferiría estar con ella en vez de estar con su novia?

—"Piensa un poco, Sana" —se dijo así misma. En eso, recibió otro mensaje, y después de darle un vistazo, se decidió. Sana abrió un poco la boca, miró a Momo, la tomó de la mano y cuando tuvo su atención, habló.

—Momo, tengo que irme. —¿Qué? —respondió la nombrada. —Debo irme, Momo. Debo hacer algo importante.

Momo se quedó sin responder. Recibió un beso en la mejilla de su novia, quizás como una especie de compensación por no haberla dejado hablar. Cuando quiso hacerlo, ella ya estaba alejándose con su bolsa y su chaqueta en las manos.

»Tzuyu (mensaje entrante)

"¡Encontré un lindo café de gatos! ¿Quieres ir? Estoy cerca de la central de trenes 🥰".