Capitulo único

767 75 4
                                    

No hubo una primera cita, un primer beso ni una primera sonrisa... una miraba, basto una pequeña mirada para darnos cuenta de que nos pertenecíamos y para ambos fue suficiente, completamente mágico e inesperado.

Nunca creí en el amor ah primera vista, no antes de él, los cuentos de hadas tampoco me llenaban, nunca hubo mariposas oh risas al verlos, siempre me pareció tan tonto observar como con solo pasar un par de minutos ya todo era color de rosa solo con su presencia, ¿Cómo era posible que al final de la película ya estuvieran comprometiéndose con un completo desconocido? ¿Cómo podían simplemente saber que era el indicado? ¿El hombre de sus sueños?. Inclusive yo, ah mis 18 años no había logrado una relación de más de dos meses, no lo entendía... realmente no lo entendía.

Me había enamorado muchas veces, demasiadas, pero nada se comparaba al gran afecto que sentía por ese hermoso chico de ojos azules. Nunca me había enamorado así, era ese sentimiento que había escuchado de muchos, era la pertenencia total ah alguien en quien ni siquiera sabias si confiar, solo te llega... sin previo aviso y te abruma, privándote del oxigeno ah tu alrededor.

No sabia el motivo, la causa. Alec nunca había querido decirme el porque estaba conmigo a pesar de las peleas y diferencias, y era muy obvio, como el agua y el aceite, completamente diferentes y difíciles de unir, más sin embargo, seguíamos aquí el uno para el otro amándonos por completo sin esperar nada ah cambio, brindándonos todo lo que necesitáramos y deseábamos para volver al otro plenamente feliz. Y quizás era lo único que importaba.

Por lo menos hasta que empecé ah preocuparme...

Que Alexander llegara hasta tarde de vez en cuando no era raro, ser el dueño de una gran y prestigiosa empresa era difícil, y lo entendía, mi padre había pasado por lo mismo una y mil veces, pero no le llegaba ah los talones ah esto. Mi novio nunca se preocupo por el hecho de que lo esperara hasta su regreso siempre abría la puerta con una gran y linda sonrisa al verme ahí y ah mi me fascinaba. Pero ahora ya no podía, el sueño me vencía completamente pasando las once de la noche cuando mi chico siempre volvía ah casa mas tardar ah la diez y ni quiera sabia que estaba pasando.

No quería molestar ah Alec con algo tan mundano como creer que veía ah alguien más, pero la agonía no me dejaba controlarlo... mis emociones estaban al borde y solo me sentía arder de miedo y frustración, la sola idea de dejar ir al amor de mi vida era impensable. Alexander Lightwood es y siempre será mi verdadero amor, aquel amor de película que en su pasado me parecía ridículo, aquel que pensé nunca tener.

> El día que te mire por primera vez fue el mas memorable de mi vida, Magnus. No puedo darte un motivo por el cual Te amo pero puedo decirte que sin lugar ah duda eres lo mejor que me ah pasado y no tienes una idea de cuanto eh esperado por ti, cuanto eh deseado tenerte entre mis brazos como lo hago ahora, cuanto eh deseado conocerte. No puedo darte un motivo oh razón, pero puedo demostrártelo como ambos sabemos hacerlo, voy ah hacerte el amor <

Era impresionante como seguía presenciando sus caricias en cada parte de mi cuerpo, cada fibra de mi ser vibraba por él de una manera irracional, eh instantánea. Su aliento seguía en mi cuello de alguna manera, sus manos recorrían mis brazos y espalda pausadamente mientras dejaba rastros de besos en mi cuello y yo me sentía ah morir derritiéndome de amor en sus brazos con cada acción y palabra.

Y ahora estaba aquí, en la zona de guerra mas grande de mi existencia, este lugar siempre había sido especial para los dos, si había algo importante que decirnos teníamos presente que sin ninguna excepción debía ser aquí, donde tuvimos la peor cita del mundo. Era increíble como aun podía recordar cada detalle de ese día cuatro años atrás, como Alec accidentalmente había chocado con nuestro mesero derramando nuestro pedido sobre mi, oh como habíamos visto y hablado con uno de mis ex quien, mas encima, había tratado de golpearme. Mi escena de celos tampoco había estado de mas después de que otra mesera le diera su número ah mi chico aun sabiendo que no tenia el camino libre.

Mi Motivo - MalecDonde viven las historias. Descúbrelo ahora