regreso

4 0 0
                                    

Día 1 de entrenamiento

Era obvio quienes eran los monstruos más fuertes de todos, pero... a gaster le encantaba presumir su gran habilidad en combate. Esa actitud les comenzaba a molestar a grillby y a sans.

-es un pesado- dijo sans mirando la escena que gaster estaba armando al combatir con undyne, ella a penas y lo podía tocar

-siempre lo ha sido- dijo grillby comenzando a brillar más de enojo

Sans estaba por calmar a grillby cuando recibió una llamada a su teléfono celular. Le pareció extraño que le estuviese llamando toriel pero aun así contesto.

"hola tori"

"¡dios sans! ¡¿Por qué has tardado en contestar?!"

"tranquila tori ¿Qué paso?"

"¡no vas a creerlo!"

"ya me estoy preocupando ¿Qué sucede?"

"hola sans... ¿me has extrañado?"

Esa última no era toriel, no podía serlo su voz no se parecía ni siquiera. No esa voz era de alguien más, alguien familiar...

Sans tiro el teléfono de la impresión, sonrió y lágrimas comenzaron a salir de sus cuencas.

-¡sans! ¡¿Estás bien?!- pregunto grillby preocupado

-¡ELLA ESTA VIVA!- grito el esqueleto antes de tele transportarse

Grillby se quedó perplejo, la ver a sans irse así pensó que algo malo había pasado. Gaster alcanzo a escuchar lo que dijo, sin dudarlo pensaba tele transportarse pero, por alguna razón, no pudo; no le tomo importancia en ese momento y simplemente se fue corriendo.

-¡¿A dónde vas?! ¡Aun no termino contigo!- dijo undyne algo molesta por como gaster simplemente se fue

Grillby ya se había preocupado por sans y que gaster se fuera así no lo tranquilizaba. Estaba por seguirlos cuando sintió una mano tomarlo del hombro.

-¿grillby? Te ves tenso ¿está todo bien?- esa era sin duda la voz de muffet

-¿muffet? Creí que irías a ver a (t/n)- dijo grillby

-¡pues venía a decirte las buenas nuevas! ¡(t/n) se curó de la nada!- dijo muffet

-¡¿volvió a ser un demonio?!- dijo grillby con clara sorpresa

-...no, es una humana de nuevo, ella dice que no importa pero se ve tan deprimida- dijo muffet triste

Grillby se sentía mal por ella, bueno, tenía una razón de esto. Estaba enamorado. Había pasado hacía poco en realidad, a unos meses de salir a la superficie. Ella lo había hecho superar a murev.

-¿Dónde está (t/n) ahora?- dijo grillby

-pues... en su departamento no ya que la corrieron, su casero ya había tenido quejas de su vecino, el humano nos odia- dijo muffet molesta

-¿y sus cosas?- dijo grillby

-se las empacaron y me las dieron, se quedara conmigo un tiempo, no me molesta- dijo muffet

-¿está en tu casa ahora?- dijo grillby

-no quiere salir, se siente como si no estuviera en su cuerpo, en parte la entiendo pero... no creo que sea bueno que se aislé así del mundo- dijo muffet

Grillby sabía de algo que quizás animaría a (t/n) pero eso implicaba que dedicara todo el día en ello. Muffet se veía tan triste por ella, no había de otra, tenía que ayudarla.

--------------------------------------------------------------------------------------

Sans apareció fuera de la casa de toriel y tocó la puerta con fuerza. De inmediato le abrió frisk quien tenía una sonrisa de oreja a oreja.

-¡ENTRA SANS!- dijo frisk jalando a sans dentro de la casa

Sans entró sin protestar y en cuanto llegó a la sala vio a quien nunca creyó volver a ver.

-hola sans... Mi niño-

-¡MAMÁ!- grito sans lanzándose a los brazos de murev

La reunión era de lo más conmovedora.

-¡¿cómo volviste?!- dijo sans mientras limpiaba sus lágrimas

-¡yo tampoco lo entiendo! ¡Cuando unieron mi alma yo solo, me regenere!- dijo murev soltando un poco a sans

Volvieron a tocar la puerta, esta vez toriel fue quien abrió la puerta. Era papyrus, quien en cuanto abrieron entró corriendo.

-¡MAMÁ!- dijo papyrus abrazando a murev y levantándola del suelo

-¡PAPYRUS! ¡Como haz crecido mi bebé!- dijo murev

-¡NOS ALEGRA TANTO QUE VOLVIERAS!- dijo papyrus dejando a murev en el suelo

-¡me alegra tanto volver! ¿Y su padre?- dijo murev

Sans y papyrus se miraron uno al otro, la verdad no querían decirle a su madre que papyrus ya lo sabía todo pero debían hacerlo

-ya no queremos que le digas nuestro padre- dijo sans molesto

-¿le contó todo?- dijo murev

-si lo hizo, yo que creía que era un buen padre- dijo papyrus

Tocaron a la puerta; frisk fue a abrir pero no pudo detener a quien entró.

-¡ESPERE SEÑOR!- dijo frisk pero gaster no escuchó

Gaster y murev se miraron a los ojos. El silencio se hizo presente, ninguno dijo nada. Sans tenía tantos deseos de sacar de ahí a gaster pero murev se le adelanto, uso su telequinesis y lo sacó por la misma puerta en la que entró.

-¿mamá, estas bien?- dijo sans

-si es que... aún es muy pronto para olvidar lo que hiso- dijo murev

Gaster se sentía tan mal, pero no esperaba que ella tan solo se lanzara a sus brazos para después decirle que lo perdonaba por todo y que lo amaba.

Eso debería esperar. 

segunda oportunidad CANCELADAWhere stories live. Discover now