Capítulo 26: No acepto

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"La decisión más difícil de mi vida...que voy a desayunar?"

Literalmente me lleve a esta floja cargando como niña pequeña de mi cama, no por ser romántico o amable sino porque se la van a llevar a mi nueva casa y ella también tiene que llevarse todas sus cosas puesto a que pague por cierto tipo de muebles incluyendo mis cosas y tal vez algo de ella y lo tiene que dejar en la puerta para que se lo lleven de otro modo no pienso pagar extra para más cosas.

No quiero hacerme el cretino o la mala persona pero para lo delgada que es en verdad esta pesada tal y como dijo su mama, no es doble sentido pero enserio como pesa y como esta en modalidad "no me muevo porque considero esto un detalle romántico" literalmente es peso muerto, hasta mi padre me recomendó algo para el dolor de espalda y mama le dio una botella de vino especial de esos que te ponen loco y caliente, cortesía del tío Ferrum para precisamente hacer eso puesto claro, tengo algo en mi bolsillo y es para ella y no es un anillo, es una caja vacia pues el anillo lo tengo escondido en mi camisa tan solo para jugarle una cruel broma... me arrepentiré pero si no puedes reir con tu pareja para que demonios somos eso.

Hasta llegar a la pista de la casa de mis padres la cargue pero en cuanto puse un pie afuera con ella en mis brazos curiosamente su madre, Nephy, Aureia, mi tío Ferrum y unos vecinos curiosamente estaban pasando, en ese preciso momento en el que tengo a la mujer de mi vida en mis brazos saliendo de una puerta mientras todos me etan viendo la reacción mas lógica seria celebrar o correr por los nervios, la mia no.

"Aprovechando la bola de curiosos, te vas a casar conmigo no?"

Si, claramente es la opción más viable para una persona como yo y la respuesta de todos fue un grito al unisono festejando porque al fin me van a ver como el senior de familia que planeaba ser aunque ella no estaba tan feliz... simplemente se bajo de mis brazos diciendo "No, no gracias".

Qué?....enserio qué? Han pasado años de que ella es mi pareja, después de tantas veces de tomarnos de las manos, de tantos besos, juegos de manos y arrumacos que nunca acabaron en coito finalmente me rechazo, bien, estoy bien, no estoy llorando, algún idiota me dejo un saco de cebollas en la puerta.

"Papa tu compraste las cebollas?"

En efecto en las compro para preparar unos aros de cebolla que le quedan riquísimos al condenado amargado y mientras me hacía a la idea de que me gaste cerca de lo que vale la casa en un anillo que voy a tener que empeñar para pagarme la borrachera de depresión que me va a dar cuando caiga en cuenta de que todos estos años nunca quiso casarse conmigo solo pude verla caminar hasta su casa mientras que los demás curiosos se alejaban de la manera mas rápida posible, menos Nephy, ella solo caminaba de manos mientras usaba una mini falda...rara.

Sip, me tomo media hora de estar sentado en el frente de esa vieja casa para poder moverme hasta mi nuevo hogar donde me esperaba una botella de champaña de celebración al igual que una caja de condones y varios chocolates para alegrarme la tarde, después de todo, después de todo este tiempo si me lo hubiera esperado que me diría que no, me hubiese ahorrado todo esto en fiestas y en la comida para la recepción...al menos tendre que comer por un mes.

Me dolían los pies, me pesaba el cuerpo y no quiero llegar a casa porque se lo primero que hare es tenderme en la cama o en el viejo sillón de segunda mano que habia comprado para ver la televisión con ella, la que se convirtió en mi vida y en mi razón de ser, de aguantar todas sus demencias y de haber podio olvidar a la mujer que primero se robo a diestra y siniestra mi corazón...ahora, ni largarme a un motel para contratar sexo servidorar o ver pornografía me va a animar como saber que dormiría abrazando su pequeño cuerpo junto al mio.

Tarde alrededor de tres horas en llegar a casa pero no entre, no quería ver en lo que se pudo haber convertido en el dia mas feliz de mi vida sabiendo que ahora es el dia mas deprimente de mi vida y mientras dejaba que mi corazón se deshagorara en forma de lagrimas en la simple pero mundana entrada de ese apartamento me preguntaba "Cuano paso? Cuando me dejo de querer?"

Ya era de noche y las luces de la calle estaban encendidas, papa me habia regalado una cajetilla de cigarros de tabaco, no de los que dan risa sino de los normales con mi nombre marcado en plateado sumado a un encendeor con un corazón en el..con mi inicial de un lado y el de Aiko en el otro, tal como me siento ahora y no soy de fumar, de hecho este seria mi primer cigarro aunque el viejo me dijo "Cuando te sientas que no puedes mas, que sientas que tu vida no da para mas fúmate uno, relájate y deja que las cosas se acomoden al punto donde tu las puedas resolver" Dudo que sea el mejor consejo del mundo papá, pero hay veces en las que hasta tus idioteces me animan y con una sonrisa en la cara encendí ese cigarro para darle la primera y asquerosa bocanada, a nadie le gusta su primer cigarro pero con unas cinco mas ya me fui acostumbrando y en eso las lagrimas cesaron.

No creo dormir en mi cama y el clima afuera es un tanto agradable, me vere un tanto extraño durmiendo en mi propia entrada pero no siento ningún deseo de dormir dentro hasta que la puerta me dio un fuerte golpe en la cabeza, perfecto aun no termino de mudarme y ya tengo problemas de ladrones, por eso el país no progresa chingado!

"No vas a entrar? En el reporte del clima dijeron que haría frio...."

Para acabarla de arruinarme el dia o la noche mejor dicho mi ex pareja se habia mudado a esa casa de las pesadillas porque no creo dormir tranquilo sabiendo que ella se quedaría aquí también pero en efecto preferia una hipotermia que el frio trato de su corazón...que payaso sone pero asi me siento, un payaso que le acaban de arrebatar la risa.

"La verdad planeaba dormir aquí afuera al igual que vender este lugar y dedicarme a ser sacerdote, al menos para en lo que decido que hacer con mi vida"

No estaba exagerando puesto a que...ella era mi vida, mi reina y mi mujer, mi mundo y mi diosa pero al final termino siendo mi tumba pero mientras continuaba con mi cigarro ella se sento a mi lado, no me incomoda tenerla cerca pero no espero que se quede ahí hasta que termine de entender en que diablos la cague para que en plena declaración me rechazara.

"Sabes, no quería decir que no a eso pero... tantas personas, tanta presión y ver a todos esperando que dijera que si... sin importar todo el amor que siento por ti me asuste...no espero que me perdones ni que lo entiendas, de hecho es divertido ya que jamas espere que tu dieras ese paso...en fin... fue muy lindo el tiempo que pasamos juntos, fuiste el hombre que yo siempre espere tener pero... yo no soy para ti, lo lamento..lo lamento...lo lamento lo lam...no, sabes que, no lo lamento, eres mi esposo quieras o no, yo lo quería decir!"

Con el rostro apenas reconocible por el maquillaje corido por sus ojos ella tomo mi mano para ponerme un anillo de mi talla color negro con una curiosa perla en el mientras algo molesta no se que esperaba pero yo ya no se ni que pensar...solo...necesito tiempo para pensar si era prudente darle el si por lo que de mi bolsillo tome un anillo color platino con un diamante en el, de su talla el cual me había costado trabajo encontrar uno a su estilo para dárselo en la mano al igual que el que me dio.

"Adiós señorita Aiko, necesito pensar en muchas cosas..."

Y con esa última frase empecé a caminar mientras continuaba mi cigarro.

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